Un tsunami legal amenaza el sector inmobiliario americano

 Estados Unidos es la meca de los agentes inmobiliarios de todo el mundo. En aquel país campa por sus respetos la NAR, Asociación Nacional de Realtors, con su más de millón y medio de afiliados. Los poderes de la NAR se ponen de manifiesto en los más de 100.000 millones de dólares anuales que cobran en comisiones los agentes inmobiliarios. Ahora, un juez de Misuri ha condenado a la NAR y a otras entidades inmobiliarias a pagar nada menos que 5.000 millones de dólares para compensar a los demandantes. El asunto es que esa es la primera de una serie de demandas colectivas que están en marcha en aquel país. 

Por supuesto que la NAR va a recurrir la sentencia, con lo que el camino legal puede ser largo. Estos pleitos remiten a otros tan sustanciales como la batalla legal contra las tabaqueras. ¿Pero qué puede haber de malo en que la gente contrate a un agente inmobiliario y le pague una comisión por la venta de su propiedad si eso se refleja en un contrato firmado por ambas partes voluntariamente? De hecho, los ciudadanos de aquel país no salen de su asombro, empezando por el millón y medio de profesionales del sector que están viendo cómo se dirime su futuro en los juzgados.

La acusación de fondo es que los inmobiliarios a través de sus sistemas locales de venta compartida, fijan los precios (en este caso las comisiones) y ejercen prácticamente un monopolio del sector. La supuesta evidencia es que las comisiones se han mantenido sin cambio alguno (entre el 4%y el 6% del precio de venta), a pesar de la subida de precios de los inmuebles y la innovación tecnológica que facilita a los particulares ponerse de acuerdo sin intermediarios. 

El caso es que en Estados Unidos, el 90% de las operaciones de compraventa tiene algún agente inmobiliario involucrado en la parte del vendedor o en la del comprador. Y en el 90% de ese 90% hay un agente inmobiliario por cada una de las partes. Así se entiende lo de la meca de los inmobiliarios.

Suscríbete para seguir leyendo