La Feliz Gobernación

La investidura dura

Fernando López Miras durante el debate de investidura de este jueves.

Fernando López Miras durante el debate de investidura de este jueves. / Iván Urquízar

Ángel Montiel

Ángel Montiel

En la sesión de investidura de López Miras vimos que el presidente no aplaude con las dos manos, sino dando sueves golpes con la palma izquierda sobre la mesilla de su escaño. Que la todavía vicepresidenta trepatrans, Isabel Franco, luce cara de funeral, tal vez porque, al no haber repetición electoral, el de este mes será su último sueldo contra nuestros impuestos. Que Puigdemont abandonó Waterloo por unas horas para adquirir presencia virtual en Cartagena, de tan mencionado.

Que la expresión de la podemita María Marín «se lo pasan ustedes por el forro», por muy coloquial que sea, el PP no se la pasa por el forro. Que, según el socialista Pepe Vélez, la amnistía es una cosa corriente, el pan de cada día, ya que la derecha que devino en el PP votó a favor de una en el 77 del siglo XX. Que el popular Quino Segado afeó al líder del PSOE haber sacado malos resultados en las urnas, él, que jamás se ha presentado a unas elecciones a no ser de paquete, y que aun habiendo sido presidente del PP en Cartagena su propio partido juzgó que no era presentable como alcaldable.

Que el jefe de Vox, José Ángel Antelo, discurseó más allá de las áreas de Gobierno que le serán encomendadas a su partido, como vicepresidente que ya se ve de todos los consejeros (y consejeras, se supone). Que Vélez, en formato de caballero calasparreño, defendió a la dama de Podemos de las réplicas gestuales del presidente mientras ella avanzaba en su exposición. Que Marín, tan prejuiciosa con la prensa, exhibió sin embargo variados titulares de ésta como prueba de autoridad. Que el portavoz socialista se sumó a las críticas al sanchismo para descubrir finalmente que se refería al expresidente Pedro Antonio Sánchez.

Que el intervalo de unos diez segundos entre que la secretaria de la Mesa de la Asamblea apeló al nombre del diputado de Vox y expresidente de la Comunidad por el PP Alberto Garre hasta que éste dijo ‘sí’ se hizo interminable. Que Vélez recordó al constitucionalista PP que, en su día, el partido sobre el que se refundaron votó la Constitución ‘a medias’. Que para López Miras existe la ‘violencia de género’, aunque no ose imponer el concepto en el programa común con Vox. Que el portavoz del PSOE nos hizo dudar por unos momentos sobre si estaba presentando su programa de Gobierno para la repetición electoral dentro de un año.

Que la manifestación contra el pacto PP/Vox a las puertas de la Asamblea quedó confundida como una ligera cola para entrar al anexo Carrefour. Que a María Marín no le gusta el chóped de El Pozo ni la vamos a ver nunca en la terraza del Odiseo. Que Cuca Gamarra, invitada por el PP al evento, nos trajo la noticia exclusiva de que «Feijóo ganó las elecciones», pronunciada en un canutazo ante la prensa en modo circular, tras cada punto y aparte con parecidas palabras hasta que probablemente ella misma quedara convencida de tamaña novedad. Que, en fin, López Miras sumó treinta ‘síes’, nueve más de los que tenía por derecho, y eso que las coaliciones no le gustan «porque son un engaño». Una frase, ahora inoportuna, que debería guardarse para recuperarla después.

Suscríbete para seguir leyendo