Miguel Ángel Mora, hacker: "La regulación de la IA no es la solución"

No es un secreto que quienes mejor protegen a los ciudadanos de los peligros de internet son los propios ‘hackers’. Y en la Región está uno de los piratas informáticos más reconocidos de Europa y del mundo, Miguel Ángel Mora, CEO de la empresa tecnológica Cibinar, especializada en inteligencia artificial y ciberseguridad.

La nueva legislación aprobada por la Unión Europea afecta de lleno a la actividad que desarrolla. «Está bien que sirva para potenciar la ética de esta herramienta y su visibilidad, pero no creo que la regulación sea la solución a los peligros de la inteligencia artificial, sino la educación».

Su argumento es muy sencillo. Mientras que las empresas legales y reguladas como la suya, que se encargan de proteger a sus clientes de ataques externos, sufrirán restricciones a la hora de usar ciertas tecnologías para según qué casos, los «cibercriminales» están libres de limitaciones. «Nos van a llevar ventaja».

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Mora sabe de lo que habla, ya que se especializó en operaciones militares electrónicas (confidenciales) en Oriente Medio. De hecho, la nueva legislación europea permite, por ejemplo, el uso de sistemas de identificación biométrica en tiempo real por parte de las fuerzas de seguridad en situaciones «muy concretas y bien definidas».

Esta utilidad es una de las muchas que desarrollan en Cibinar, una empresa que ofrece inteligencia artificial en forma de analítica de vídeos, ‘business intelligence’ y biométrica facial y seguridad perimetral con funciones antisabotaje, capaz de detectar intrusos y vehículos en espacios restringidos, generando alertas tras una intrusión.

Hace cinco años que Miguel Ángel Mora (36 años, Totana) dejó sus negocios anteriores para convertirse en un ‘hacker ético’. Hoy, Cibinar tiene una plantilla que supera la treintena de profesionales, entre ellos, otros ‘hackers’ conocidos internacionalmente, y presta servicio a empresas españolas, de Estados Unidos, República Dominicana, Chile, Estonia, Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudí y China.

"No hay que ser tan alarmistas: desaparecerán profesiones, pero también se crearán otras nuevas"

Autodidacta —dice que lleva programando desde los siete años—, subraya que lo que se está viviendo ahora es el auge de la «inteligencia artificial con lenguaje natural», ya que la tecnología se usa desde hace muchos años.

Considera esencial no perder de vista que «la IA es obra del hombre» y «lo más cercano al pensamiento del ser humano en cada uno de los distintos escenarios». En este sentido, «el peligro depende del uso que se le dé». Lo que a él le preocupa, sin embargo, es que «nos hace cada vez más tontos, porque no contrastamos». «Los libros desaparecen y solo queda la IA, ¿qué pasa si nos miente?», se pregunta.