a pijo sacao

El señor X de las redes sociales

Dionisio Escarabajal

Dionisio Escarabajal

Elon Musk se ha comprado un juguete y le ha cambiado el nombre, algo típico de un niño, aunque sea un niño mayor como es el caso del hombre más rico del planeta. La red social del pajarito ahora se llama X. De esta forma quiere alejarse de un proyecto en declive y darle un aire nuevo que se parezca más a sus dos rotundos éxitos empresariales: Tesla y SpaceX.

Aunque nadie se explica las razones que le han impulsado a cargarse el famoso pajarito, un icono clásico de la era internet, como la F de Facebook o la rosa que representa el logo de Instagram, por lo menos sabemos que le ha salido barato el cambio. Musk no ha pagado una fortuna a un prestigioso estudio de diseño californiano, como hizo Mario Conde con el logo de Banesto, porque simplemente está utilizando una X de un popular alfabeto libre de derechos.

Parece claro que con el cambio, Elon Musk y su renovado equipo de dirección en Twitter quieren acercarse a la idea que una vez contó el millonario antes de su accidentada adquisición: la conveniencia de una app total, equivalente al WeChat chino, donde se pueda chatear, relacionarse con los amigos, comprar y hasta pagar en un restaurante. Se trataría de, partiendo de lo que ahora es Twitter, crear una app que no necesite otras app para desarrollar tu vida digital al completo.

Ambición no le falta al magnate de origen sudafricano. Primero prometió electrificar el mundo del automóvil, promesa que se ha hecho realidad con Tesla, una empresa que vale en Bolsa más que los siete grandes fabricantes de automóviles norteamericanos juntos. Y después apostó por construir una empresa aeroespacial, que está desarrollando su propio modelo comercial privado y ayudando a la NASA a reconquistar la Luna, con regular éxito de momento.