Tenis

Carlos Alcaraz sufre para salvar el primer escollo sobre hierba

El tenista murciano remonta en Queen’s al francés Arthur Rinderknech, frente al que pierde el set inaugural y se encuentra con un 0-2 en el tercero, para citarse mañana con el checo Jiri Lehecka en segunda ronda

Carlos Alcaraz devuelve una bola en el partido de primera ronda en Queen’s.

Carlos Alcaraz devuelve una bola en el partido de primera ronda en Queen’s. / EFE/EPA/ANDY RAIN

Dioni García

Dioni García

El tenista murciano Carlos Alcaraz Garfia salvó el primer escollo que se le presentó en la recién iniciada y breve temporada en tierras británicas sobre hierba, al superar la primera ronda en el ATP de Queen’s, donde tiene la oportunidad de recuperar el número 1 del mundo, aunque para ello debe ganar el Cinch Championships que se disputa en Londres.

En un día con sobresaltos antes y durante el partido, el jugador de El Palmar tiró de clase y capacidad de sufrimiento para superar al francés Arthur Rinderknech (4-6, 7-5 y 7-6[3]), quien sustituyó en el último momento a su compatriota Arthur Fils, quien dos horas del encuentro se ‘bajó’ del mismo por una lesión. La organización tiró de un ‘lucky loser’ -jugador eliminado en la previa- que había derrotado en primera ronda de la clasificación a Feliciano López y perdido en segunda con Grigor Dimitrov. Rinderknech, de 27 años y número 82 del mundo, llegaba con más rodaje que el murciano pese a que también tiene corta experiencia en hierba. En el recuerdo estaba el enfrentamiento de Alcaraz ante otro ‘lucky loser’, el alemán Jean-Lennard Struff, en Madrid, una final donde sufrió mucho para lograr su segundo Masters 1.000 de la temporada. Y al igual que en el mes de mayo en la capital de España, el murciano tuvo muchos problemas ante Rinderknech.

La hierba obliga a los jugadores a cambiar mucho su estilo de juego. Atrás ha quedado la tierra batida, con largos peloteos. En Londres es todo lo contrario. Puntos cortos donde el saque y la volea son fundamentales. Por ello los errores se penalizan mucho más. Y en el primer set se encontró con esa situación Alcaraz. Aparecieron las dudas tras desperdiciar tres bolas de rotura en el séptimo juego y se encontró con un quiebre que ya no logró recuperar, para cerrar el francés la manga.

Alcaraz se encontraba en situación límite y en una superficie donde su juego no es tan efectivo como en tierra y pista rápida. Pero el murciano, pese a no poder desplegar esa velocidad de movimientos que tantos éxitos le ha dado, logró la remontada. En la segunda manga ninguno de los tenistas cedió su saque hasta el 5-5. En el undécimo juego llegaron las imprecisiones del galo y el ‘break’ del murciano, que confirmó en el duodécimo para forzar el tercer set.

La remontada estaba en camino, pero aún tuvo que dar la vuelta el murciano a un tercer set que se le puso cuesta arriba en su arranque al ceder un quiebre (0-2). La reacción de Alcaraz fue rápida, devolviéndole la rotura a su rival, para después perder dos oportunidades de ‘break’ en el séptimo y noveno, llegando finalmente el choque a la muerte súbita, donde se vio un tenis de muchos quilates del murciano, que mañana jueves, en un duelo inédito con el chero Jiri Lehecka, verdugo del malagueño Alejandro Davidovich, buscará el pase a cuartos de final en Queen’s, donde se enfrentará, en caso de ganar, a Grigor Dimitrov o Francisco Cerúndolo.

«Me pongo vídeos de Federer y Murray para mejorar en hierba»

Carlos Alcaraz aseguró tras su triunfo en primera ronda de Queen’s que «la hierba nunca es fácil. Durante el partido pensaba que iba a ir a mejor, que me sentiría mejor. Necesito esto, horas en pista, jugar todo lo que pueda. Para mí es bueno tener un partido así de duro», explicó el murciano. «Mis expectativas en este torneo no son muy altas», reconoció Alcaraz, que nunca había ganado un partido en hierba fuera de Wimbledon. Además, desveló una de sus claves para mejorar en esta superficie: «Me gusta ponerme vídeos de Federer, de Murray, que son de los jugadores que mejor se mueven en hierba. No voy a hablar de Djokovic porque resbala como si fuera tierra y eso no va a ser mi caso. Ya no es cómo golpean, porque cada uno tiene su estilo, pero ver cómo se mueven, e intentar imitarlos», explicó.