Murcia

Cambio de tendencia en la movilidad gracias a los nuevos carriles bici y bus

Colectivos como MurciaLab o Murcia en Bici destacan el aumento de los usuarios, aunque advierten que lo mejor está por llegar cuando se cierre la red ciclista

Los autobuses, a la espera de que acaben las obras

Un autobús y una ciclista, circulando por las nuevas zonas destinadas al transporte público y a los vehículos de movilidad personal del plan de movilidad | FRANCISCO PEÑARANDA

Un autobús y una ciclista, circulando por las nuevas zonas destinadas al transporte público y a los vehículos de movilidad personal del plan de movilidad | FRANCISCO PEÑARANDA / A.LORENTE

Alejandro Lorente

Alejandro Lorente

Murcia ya está experimentando un cambio de tendencia en su movilidad urbana gracias al plan de movilidad, al menos, eso es lo que piensan algunos de los colectivos a los que más atañe la implantación de los nuevos carriles bici y bus.

Desde la plataforma MurciaLab hacen una valoración «positiva», no tanto por la situación actual sino por la «potencial». Está organización llevó a cabo hace unos días un pequeño análisis del tráfico en Gran Vía, y en menos de 30 minutos contabilizaron a 40 usuarios de bicicletas, un 10,6 por ciento del tráfico general, «una cifra bastante esperanzadora teniendo en cuenta que lo hicimos durante la primera semana de funcionamiento de los carriles y no habían empezado todavía las clases», señala Enrique Rodríguez, uno de los miembros de la organización.

Desde MurciaLab también han detectado que los carriles bici que mejor funcionan son los de calle Torre de Romo y Gran Vía, un uso que sólo puede multiplicarse cuando esos recorridos se unan. Para este experto en movilidad es evidente el cambio de tendencia en los desplazamientos en Murcia. «En las zonas donde ya están funcionando los carriles se nota el cambio; incluso a nosotros nos ha sorprendido lo rápido que ha sido», explica Rodríguez.

Por otra parte, hay otros tramos en los que no se aprecia tanta actividad, como el de Ronda Norte, «entre otras cosas, porque todavía no está unido con el de Primo de Rivera y todavía está por hacer la plaza Díez de Revenga». Asegura este miembro de MurciaLab que cuando se complete la red «es cuando todo esto tendrá sentido».

Cambio de tendencia en la movilidad gracias a los nuevos carriles bici y bus

Cambio de tendencia en la movilidad gracias a los nuevos carriles bici y bus. / Francisco Peñaranda

Para Antonio Sánchez, del colectivo Murcia en Bici, el plan de movilidad «sí está funcionando; se están viendo más bicis que nunca», algo que ha podido comprobar especialmente en el barrio del Carmen. Al igual que MurciaLab, Sánchez destaca la importancia de cerrar la malla ciclista. «Deben unirse las arterias de Torre de Romo y Marqués de Corvera, y queda pendiente la unión con las pedanías; por el centro más o menos te puedes mover, pero lo que le da miedo a la gente es desplazarse desde las pedanías (Puebla de Soto o Puente Tocinos) hasta el centro, a su puesto de trabajo».

Tanto MurciaLab como Murcia en Bici alertan igualmente de los problemas que se generan con la invasión del carril bici. «Llegan los vehículos de reparto y dejan el coche sobre el carril bici, lo mismo hacen los padres cuando dejan a los niños en el colegio», indica Antonio Sánchez. Desde MurciaLab añaden que es necesaria la instalación de bolardos, sobre todo en Gran Vía para reducir el riesgo de accidentes. Ambas entidades apuestan por campañas de concienciación y por mantener un dispositivo especial en la Policía Local.

«Hay que educar a la gente»

Por su parte, el presidente del Comité de Empresa de Transportes de Murcia, los autobuses conocidos como ‘coloraos’, Miguel Cano, también hace un balance positivo, pero lanza algunas advertencias. «Hay que empezar a educar a la gente; en Gran Vía solo han dejado un carril para el tráfico privado, y muchos conductores terminan quemados de esperar en la cola e invaden el carril bus». Otro punto que está generando problemas es el tramo entre Pío Baroja y Torre de Romo. «No hay carril para coches particulares, pero está mal señalizado, no hay un prohibido el paso, por lo que una vez que se meten ahí circulan por el carril bus», denuncia.

Sobre la puntualidad, reconoce que en este momento es difícil cumplirla y que hasta que no acaben las obras, sobre todo las que están realizando en el barrio del Carmen, no se van a cumplir los tiempos. «Hay trayectos de 45 minutos que terminan superando la hora». Entre las zonas más conflictivas señala la zona entre la estación de Renfe, paseo Marqués de Corvera , Pintor Pedro Flores: «Eso es un caos absoluto». También lamenta que se haya prohibido la parada de calle Proclamación, algo que ha disparados las quejas de los usuarios.