Un Sefer Torá, el libro de la ley y el patrimonio identitario del pueblo judío, que se corresponde con los cinco que forman el Pentateuco en el Antiguo Testamento, llegaba este jueves a la ciudad. Y lo hacía 530 años después de que los judíos abandonaran la Sinagoga del Castillo. El ejemplar, de 200 años de antigüedad, era donado al Ayuntamiento de Lorca por la comunidad judía de Málaga, y éste a su vez lo cedía a la Federación San Clemente para ser custodiado en el ciuFront, Museo Medieval de Lorca.

Silvia Teruel coloca el manto de Torá que bordaba con detalles inspirados en las yeserías de la Sinagoga del Castillo. Pilar Wals

La entrega la hacía el vicealcalde y concejal de Turismo, Francisco Morales, al presidente de la Federación San Clemente, Luis Torres del Alcázar, aunque ambos acudían el día anterior a Málaga a recoger lo que inicialmente iba a ser una cesión temporal. Al acto, en la Sinagoga Bet Saadia de la Comunidad Judía de Málaga, asistían el rabino AAron Levi Cohen, el vicepresidente de la Comunidad Judía de Málaga y presidente de la Federación de Comunidades Judías de Andalucía, David Chocrón, y el responsable del departamento de Cultura y Acogida de la Comunidad, Moisés Hayon. Además del presidente y la gerente de la Red de Juderías de España Caminos de Sefarad, Juan Pérez y Marta Puig, respectivamente.

La Torá era envuelta en su nuevo manto tras la presentación de las dos piezas en el ciuFront, en la antigua iglesia de Santa María. Pilar Wals

Torres del Alcázar agradecía la “excelente gestión” realizada por el vicealcalde para “conseguir traer a Lorca una Torá de esta importancia y el que haya decidido cederla a la Federación”. Y recordaba que “la Torá constituye el núcleo de la revelación divina y es el símbolo de la luz de la creación. Las lecturas de este libro sagrado están presentes en las ceremonias religiosas del judaísmo y son de especial importancia”.

El ritual que los judíos efectúan para la lectura semanal de la Torá abarca el libro del Pentateuco el cual se divide en distintas secciones que se desarrollan durante las semanas comprendidas dentro del año judío. “La Torá contiene la palabra de Dios y, es por ello, que se considera un objeto sagrado que, dependiendo de cada comunidad judía, se conserva a través de diferentes métodos y se elabora con diversos materiales. En el ciuFront, la custodiaremos de la forma más respetuosa posible en las celebraciones judías que se realizan en Lorca”, destacaba Torres del Alcázar.

Luis Torres del Alcázar se disponía a abrir el manto para acoger la Torá mientras ésta era portada por Francisco Morales como manda la tradición. Pilar Wals

El vicealcalde manifestaba que “se trata de un hecho histórico para Lorca. También de reparación de las heridas pasadas con esta importante cultura y religión. Por primera vez desde 1492, habrá una Torá en Lorca, remarcando nuestro compromiso con el legado sefardí presente en la ciudad y que tiene en la Sinagoga de nuestro Castillo su mayor exponente”.

Conjuntamente con la presentación de la Torá se mostraba el manto que conservará los textos en su interior, una iniciativa de la Federación San Clemente propuesta a la Concejalía de Turismo que gustosamente arropó el vicealcalde y concejal de Turismo, como recalcaba Torres del Alcázar. “El bordado está inspirado en los restos arqueológicos de la yesería de la Sinagoga que se encuentran actualmente en el Museo Arqueológico. Está realizado sobre campo carmesí, color que otorgara el Rey Juan II a Lorca, que también es uno de los colores que dios estableció para la construcción del tabernáculo de Moisés”.

Las yeserías contienen elementos que recuerdan la figura del sol y está presidido, por el escudo de Lorca. “Este manto bordado con la técnica y materiales de Lorca es idóneo para conservar un elemento tan importante como esta Torá, que se convierte a partir de ahora en una reliquia lorquina que enriquece nuestro patrimonio y potencia nuestro atractivo turístico y que no podía custodiar nadie mejor que la Federación San Clemente por el excelente trabajo realizado al servicio de Lorca y de la cultura judía durante estos años”, concluía Francisco Morales.