Agricultura

Las organizaciones agrarias confían en una respuesta masiva el día 21

UPA, Asaja y COAG aseguran que las protestas de estos días no tienen por qué desincentivar la convocada en dos semanas

Protesta de agricultores por la crisis del campo en Murcia, este miércoles.

Protesta de agricultores por la crisis del campo en Murcia, este miércoles. / EFE. Marcial Guillén

Las organizaciones agrarias que convocaron una manifestación para el próximo 21 de febrero confían en que tendrá una buena respuesta por parte de los miles de agricultores y ganaderos que hay en la Región. 

Ante la movilización ‘sorpresa’ que estalló el martes y dio su últimos coletazos ayer miércoles, el presidente de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) en la Región, José Miguel Marín, no cree que vaya a desinflamar la protesta del día 21. «No hay razones algunas para pensar que no será una respuesta masiva del campo», aseguró. 

Tanto Marcos Alarcón, secretario general de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), y Alfonso Gálvez, secretario general de Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja), coinciden. No creen que las movilizaciones de esta semana vayan a perjudicar al calendario que tienen planeado las tres organizaciones.

«No creo que afecte, ya que la situación del sector es crítica y las movilizaciones se van a mantener en el tiempo hasta que las administraciones se comprometan a soluciones reales, eficaces y urgentes», apuntó Gálvez.

Alarcón resaltó que esperan el apoyo a unas movilizaciones que creen que son profesionales, que van acompañadas de una serie de puntos que identifican con claridad los problemas del sector agrario. 

El secretario general de UPA también subrayó que ellos, como organizaciones agrarias, son los que van a canalizar todas las inquietudes del campo a la mesa de negociación que tienen con la Administración. 

Ante las críticas de determinados manifestantes hacia las organizaciones agrarias, quiso poner de relieve que llevan décadas protagonizando las movilizaciones más importantes del sector agrario en Murcia y en España e incluso han llegado hasta la Unión Europea.

«Estamos ayudando en el día a día a los agricultores y ganaderos tramitando sus expedientes de ayudas de la PAC, de incorporación de jóvenes, de modernización, de población, ayudándoles con los requerimientos del cuaderno de campo, dando asesoramiento claro, entre otros. Nosotros tenemos un trabajo continuo y una labor demostrada», dijo.

Por su lado, Marín recalcó «la gente es libre de manifestarse cuando quiera» y que no tienen por qué haber ningún tipo de intencionalidad tras lo que se ve. «La situación del campo ya la conocemos todos, es la desesperación que sentimos los agricultores», explicó Marín, por lo que cree que lo que estamos viendo estos días es el fruto de este contexto.

Dado que el calendario de las movilizaciones se extiende por todo el mes de febrero, Marín aseguró que esto «no acaba más que empezar».

Un estallido previsible

Este descontento bicéfalo -entre la convocatoria organizada y los manifestantes independientes- ha tenido también eco a nivel nacional. El mismo presidente de Asaja, Pedro Barato, dijo en una entrevista que ha llegado un punto en el que el campo «no aguanta más» y que las organizaciones se ponían al servicio de los agricultores.

En la Región, anunciaron las movilizaciones en una rueda de prensa y posteriormente se reunieron con el presidente de la Comunidad Autónoma, Fernando López Miras, y la consejera de Agricultura, Sara Rubira, para llegar a un acuerdo sobre cómo afrontar la crisis que arrastra el sector desde hace años por una combinación entre desastres climáticos y competencia desleal de países extracomunitarios, sobre los que critican que la Comisión Europea no exige los mismos controles que en la propia UE.