Fedea incluye a Murcia entre las regiones que dan prioridad al gasto

Un grupo de comunidades, entre las cuales se encuentra Murcia, ha concedido más importancia hasta ahora en su política fiscal a mantener un determinado nivel de gasto que a la estabilización macroeconómica y, sobre todo, que a controlar su endeudamiento. Un estudio que ha publicado Fedea ofrece una aproximación a las preferencias mostradas por las comunidades autónomas en el período 2013-2022, a la hora de definir su política fiscal, la primera de las cuales es la provisión de un determinado nivel de gasto público per capita.

Los resultados del estudio, que firman Carmen Marín (Fedea) y Diego Martínez (Universidad Pablo Olavide y Fedea), registran, no obstante, grandes diferencias entre las 17 comunidades, que han dividido en tres grupos. En un primer grupo de gobiernos autonómicos, integrado por Murcia, Baleares, Castilla-La Mancha, Cataluña y la Comunidad Valenciana, el objetivo de gasto público ha contado con un peso de en torno al 70%, mientras que el de la sostenibilidad de la deuda se ha situado generalmente por debajo del 10%. Los autores conjeturan que, dados sus elevados niveles de deuda, la asistencia recibida de los mecanismos extraordinarios de financiación como el FLA «ha mantenido unas condiciones de rescate implícito que han debilitado la sensibilidad al nivel de deuda autonómica». Solo en Canarias, País Vasco, Navarra y Madrid la preocupación por la sostenibilidad de la deuda llega al 30% o el 40%.