Los 15 murcianos que pagan el impuesto de la riqueza han ingresado 2.800 euros de media

Quince ricos de la Región han tenido que pagar 42.000 euros entre todos por el llamado Impuesto de Solidaridad de las Grandes Fortunas, establecido por el Gobierno central para evitar que los contribuyentes más acaudalados dejaran de pagar Patrimonio en las comunidades autónomas en las que se ha suprimido este tributo, como Madrid y Andalucía.

Como el Gobierno regional sí ha mantenido Patrimonio, la cuota abonada por las grandes fortunas de la Región resulta poco significativa, dado que el Ministerio de Hacienda deduce a los contribuyentes ricos las cantidades que habían abonado a la Administración regional, según ha explicado el secretario general de Gestha, José María Mollinedo.

Los 42.000 euros que han pagado por el impuesto de la riqueza corresponden a la diferencia entre las cuotas del tributo estatal y del autonómico. En la Región solo pagan Patrimonio las fortunas superiores a los 3,7 millones.

Según los datos que ha ofrecido el Ministerio de Hacienda, la media que han pagado los 15 declarantes murcianos se reduce a 2.800 euros, mientras que en toda España la aportación media asciende a 52.000 euros.

La recaudación del Impuesto Solidaridad de las Grandes Fortunas ha ascendido en toda España a 623,6 millones.

La suma de la recaudación del Impuesto de Solidaridad de las Grandes Fortunas y del Impuesto sobre el Patrimonio alcanza 1.868 millones, según indica Hacienda.

La mayor parte de la recaudación del impuesto a la riqueza corresponde a la Comunidad de Madrid, donde hay 10.302 declarantes que han abonado 555 millones.

En Andalucía han tributado 865 ricos, que han abonado 29,7 millones. En Galicia hay 91 declarantes, que han pagado 9,8 millones.

El presidente de la Comunidad Autónoma, Fernando López Miras, había llegado a decir que seguiría los pasos de Madrid y de Andalucía y suprimiría el Impuesto de Patrimonio, de igual forma que ha hecho con Donaciones y Sucesiones.

Sin embargo, cuando la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, anunció la creación del Impuesto de Solidaridad de las Grandes Fortunas para evitar que se abriera una brecha entre las comunidades autónomas, el jefe del Ejecutivo regional optó por mantener Patrimonio, dado que en caso contrario el Estado pasaría a recaudar lo que él dejara de cobrar a los ricos murcianos.

Sin embargo, subió el mínimo exento de 700.000 euros a 3,7 millones. Esta exención ha reducido el número de declarantes y también la recaudación obtenida por la Administración regional. Así, en los Presupuestos de la Comunidad Autónoma para 2023 la Consejería de Hacienda había previsto unos ingresos de 15 millones, frente a los 28 millones de 2022.

El número de declarantes, que rondaba los 4.400 también se ha recucido.

El Ministerio de Hacienda precisa que el impuesto a la riqueza afecta a los patrimonios netos superiores a 3 millones de euros, se devenga el 31 de diciembre de cada año y la presentación de la declaración se produce entre el 1 y el 31 de julio. Se trata de un impuesto estatal de carácter temporal para los años 2023 y 2024.