Yolanda Díaz se desmarca ahora de la reforma para reducir los plazos de instrucción: "No va en la dirección correcta"

Yolanda Díaz retira su apoyo a la propuesta de Pedro Sánchez para atraer el apoyo de Junts a la ley de amnistía mediante una reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal para reducir los plazos de instrucción judicial y acelerar el fin de las investigaciones relacionadas con el procés. La líder de Sumar ha admitido este miércoles que no conoce la propuesta que maneja el PSOE, pero ha advertido de que "no va en la buena dirección". Un cambio de posición respecto al lunes, cuando daban la "bienvenida" a "cualquier propuesta" que pudiera concitar entendimiento para aprobar la amnistía.

En los pasillos del Congreso de los Diputados, la vicepresidenta segunda del Gobierno ha pedido "prudencia". "Sumar desconoce la propuesta exacta que se está negociando", ha advertido la dirigente, que ha señalado . "Pero por lo que conocemos por los medios de comunicación, esta propuesta parece que no va en la dirección correcta por la afectación general que puede tener". En este sentido, ha argumentado que "hay procesos que son muy complejos que necesitan de unos ritmos, unos tiempos, que requieren de cierta prudencia".

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La vicepresidenta admite así que conocieron la propuesta del PSOE a través de los medios de comunicación y que no han abordado con el PSOE el desarrollo de las negociaciones. Una situación que Díaz ha justificado en que "acabo de volver de un viaje internacional", después de estar en México y después en Roma, visitando al Papa. Aunque este martes coincidieron en el Consejo de Ministros, la gallega ha destacado que ayer no tuvo la "oportunidad" de hablar con él, pero ha defendido que lo harán más adelante.

Cambio de posición

El cambio de posición de la líder de Sumar llega un día después de que ERC también se haya descolgado de la medida tras apoyarla en un primer momento y de que Moncloa haya admitido también la complejidad a la hora de llevarla a cabo. Sumar, que apoyó la medida ahora en aras de lo que consideraba un bien mayor, como la ley de amnistía, también se enfrentaba a fuertes contradicciones, puesto que implicaba acercarse a la reforma de Mariano Rajoy y a la que bautizaron como "ley del punto final a la impunidad" o "ley Berlusconi", al decaer los procesos judiciales más complejos de corrupción, en un contexto en que en se investigaban en aquel momento casos como Lezo o Púnica.

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En las últimas semanas, Sumar ha abogado por evitar el "desgaste" en torno a la ley de amnistía y rehuir cualquier tipo de polémica en la recta final. Eso implica por una parte apartarse de estas negociaciones y por otra evitar el conflicto en torno a este asunto. Una vez que la propuesta lanzada por Sánchez ya ha generado algunas dudas tanto en los republicanos como entre los propios socialistas, que no tiene claro cómo puede llevarse a cabo, Díaz aboga por asumir también estas dudas, apartándose de una medida polémica que tampoco está claro que tenga visos de salir adelante.