Fútbol

¿Por qué el Real Murcia no se ha clasificado para los play off de ascenso?

Los malos números en casa condenan a un equipo que ha firmado una segunda vuelta decepcionante y al que le han faltado costuras para seguir el ritmo de los mejores - La ilusión generada estaba por encima de un grupo sin jugadores determinantes y con un entrenador poco decisivo

Pedro León y Loren Burón muestran la decepción tras la no clasificación para el play off

Pedro León y Loren Burón muestran la decepción tras la no clasificación para el play off / FRANCISCO PEARANDA

Ángela Moreno

Ángela Moreno

No dejó escapar el Real Murcia su presencia en el play off en la última jornada. Su derrota contra el Eldense (1-2) confirmó que no luchará por el ascenso, sin embargo, fue hace ya mucho tiempo cuando los granas renunciaron prácticamente a sus opciones de estar entre los cinco primeros. Solo hay que ver los números de las últimas quince jornadas. Contando solo lo sucedido en esos partidos, los de Mario Simón caerían hasta la duodécima posición de la tabla, casi en tierra de nadie. 

Los resultados lo dicen todo. Pero tendrán que ser los responsables del club los que busquen los motivos de esa caída en el tramo más importante de la competición. Y, analizando y analizando, las razones del hundimiento van desde el conformismo hasta la falta de futbolistas determinantes pasando por un entrenador que jamás ha sido decisivo para cambiar un partido.

1 Con los números de las últimas 15 jornadas, los granas serían duodécimos

34 puntos ha firmado el Amorebieta en los últimos 15 partidos. 27 han acumulado el Eldense y el Barcelona B. Incluso la Real B y el Castellón, los más irregulares de los cinco primeros, han sumado 21. Para encontrar al Real Murcia en la clasificación de ese tramo hay que bajar hasta la duodécima posición, y es que los de Mario Simón solo han logrado 19 de los 45 que había en juego. De hecho, en toda la segunda vuelta, los aficionados granas solo han podido celebrar seis triunfos, de los que tres llegaron entre enero y febrero.

2 Se han escapado hasta 28 puntos de Nueva Condomina

De más lejos llegan los problemas del Real Murcia en Nueva Condomina. Porque desde el mismo comienzo de liga, cuando se empató a cero con el Calahorra, han tenido los granas problemas para sacar puntos en su estadio. Mientras que eran el mejor equipo a domicilio, en casa se han dejado escapar hasta 28 puntos. A día de hoy muchos aficionados siguen lamentando las últimas derrotas ante el Intercity o el Atlético Baleares, dos equipos de la zona baja y que apenas eran capaces de ganar a nadie; los empates cedidos en el último momento ante la Real B, el Barcelona B o el Castellón o los cinco 0-0 firmados a lo largo de la liga ante clubes descendidos como el Calahorra, el Numancia y La Nucía.

3 Solo un triunfo ante equipos de play off, ninguno en NC

Ni contra los equipos de abajo ni con los de arriba. Porque el Real Murcia no ha sido capaz ni de sacar la casta para ganar la partida a equipos clasificados para el play off. De todos los enfrentamientos con los cinco primeros, solo uno acabó del lado grana, y allá por el mes de septiembre. El 1-2 a la Real B es un botín escaso para un conjunto murcianista que aspiraba a estar entre los mejores. Resultados que además hacían que, salvo con la Real B, tuviera el golaverage perdido en caso de empate con todos los demás. Ni el triple empate le hubiera valido.

4 Nadie hizo nada cuando aparecieron los primeros síntomas

«No hay que hacer un drama», decía Mario Simón cuando las victorias no llegaban y los empates se acumulaban. Hasta cinco igualadas consecutivas firmaron los granas entre febrero y marzo, cinco puntos de quince que demostraban que el equipo no estaba bien pero que pocos, especialmente dentro del club, tuvieron en cuenta. No se hizo nada ante esos síntomas que ya hacían evidente que confirmar el play off iba a ser complicado viendo que los rivales directos llegaban como aviones. Y, aunque parecía que las victorias ante el Cornellá y el Real Unión ponían fin a la crisis, la realidad es que lo peor estaba por venir. Después de la derrota ante el Baleares -16 de abril-, quedaban por delante seis jornadas, pero los responsables granas siguieron mirando para otro lado. Cuando intentaron reaccionar no tenían ni una alternativa prevista, lo que hizo que simplemente dejaran pasar el tiempo intentando vender humo en forma de ilusión.

5 Más ilusión por jugar el ascenso que plantilla para conseguirlo

Mientras el Real Murcia se empeñaba en borrarse del play off, surgía una pregunta. ¿Es porque los jugadores están fallando o es porque realmente no hay plantilla para conseguirlo?A esta pregunta, hay respuestas para todos los gustos. Pero, después del cierre de temporada, parece confirmarse que había más ilusión por luchar por el play off que plantilla. Solo hay que ver lo poco determinantes que han sido la mayoría de los futbolistas o lo lejos que están de ser top en la categoría algunos de los fichajes realizados el pasado verano como Dani Vega y Loren Burón, así como otros que continuaban de Segunda RFEF, como Andrés Carrasco, Ganet o Serna. 

Quitando a Pedro León, máximo goleador; Íñigo Piña, Julio Gracia o jóvenes como Javi Rueda y Arnau Ortiz, los demás pocos motivos han dado para continuar en el siguiente proyecto, proyecto que sí que tendrá como obligación luchar por el ascenso. Incluso el esfuerzo realizado en el mercado de invierno tampoco sirvió de nada. Solo hay que ver lo decepcionante de un Dani Romera que prácticamente ha estado toda la segunda vuelta lesionado, un Alberto Toril que solo ha aparecido al final o un Alfon que no ha sacado la calidad que atesora y que ya había demostrado en 1ª RFEF.

6 Mario Simón, nada decisivo a lo largo de la temporada

Solo dos partidos han remontado el Real Murcia en toda la temporada. Fue ante la Real B en septiembre y frente a la SD Logroñés en octubre. Hasta en seis encuentros -Nástic, Real B, Barcelona B, Numancia, Osasuna Promesas y Castellón- dejó escapar el triunfo el cuadro grana después de adelantarse en el marcador. Y es que Mario Simón no ha sido un entrenador determinante en toda la temporada. Nunca se ha sacado un conejo de la chistera para cambiar un partido o para sorprender a un rival. Ni en las jugadas de estrategia, tan importantes, se ha visto el librillo del técnico. Una y otra vez, la apuesta era prácticamente la misma. Alguna novedad en el once pero poco más.