El jefe de la Inspección de Trabajo de la Región se suma a la rebelión de los directores territoriales

Fernando Vélez ha firmado un manifiesto junto a los responsables todas las comunidades autónomas

Expresan su apoyo a las reivindicaciones de la plantilla, que hoy volverá a concentrarse en Murcia

Concentración de la plantilla de la Inspección de Trabajo en diciembre.

Concentración de la plantilla de la Inspección de Trabajo en diciembre. / Juan Carlos Caval

María José Gil

María José Gil

El jefe de la Inspección de Trabajo de Murcia, Fernando Vélez, se ha sumado a la rebelión de los 17 directores territoriales contra el Gobierno. Vélez se ha adherido al manifiesto suscrito por los máximos responsables de la Inspección en las comunidades autónomas, en el que muestran su "profunda preocupación y rechazo por la situación de bloqueo en que se encuentra el proceso de modernización y refuerzo de la institución comprometido hace casi dos años".

Los máximos responsables de este organismo del Ministerio de Trabajo se suman así a las protestas que desde el pasado año ha venido manteniendo la plantilla de la Inspección de Murcia para reclamar el aumento de la plantilla y la mejora en la dotación de medios técnicos que consideran necesaria para realizar su tarea, además de reivindicaciones de carácter económico y laboral.

José Vélez, jefe de la Inspección de Trabajo

Fernando Vélez, jefe de la Inspección de Trabajo en la Región. / L.O.

"Constatamos que otros organismos se han visto beneficiados recientemente con mejoras llevadas a cabo en muy corto plazo de tiempo y sin un ejercicio previo del análisis que nosotros hemos realizado", indican los 17 firmantes del manifiesto en alusión a los profesionales de la Justicia han logrado arrancar al Gobierno sustanciosas mejoras económicas.

Las movilizaciones de los inspectores y subinspectores de la plantilla de Murcia, que han protagonizado ya varias jornadas de huelga desde el pasado año, continuarán hoy en la Región con una concentración que está prevista a mediodía ante la sede de la Inspección, en el edificio de las Torres Azules, en las Atalayas.

Las organizaciones que convocan la manifestación de los inspectores y subinspectores prevista para este miércoles también han anunciado una huelga indefinida a partir del 26 de junio, ante las infructuosos resultados de las reuniones que han mantenido con el Ministerio de Trabajo y Economía Social.

La protesta de hoy está convocada por los sindicatos CC OO, CIG, Sislass, Sindicato de Inspectores de Trabajo y Seguridad Social, Usess, UGT y UPIT.  

Concentraciones similares se celebrarán a la misma hora en una veintena de ciudades españolas.

"Respaldamos a todos nuestros compañeros de las plantillas que estos días están movilizándose y apoyamos sus reivindicaciones, que son las nuestras", indican los jefes de la Inspección de Trabajo firmantes del manifiesto.

En el documento suscrito por Fernando Vélez los máximos responsables de la Inspección manifiestan que comparten "el diagnóstico y los problemas que afectan a nuestra institución a todos los niveles de insuficiencia de recursos humanos, particularmente de mandos intermedios, y de inexistencia de estructura adecuada que permita una organización eficaz del trabajo".

Sostienen que "estas deficiencias están afectando hace ya tiempo a la capacidad de actuación que tiene la ITSS y no permiten desarrollar todas sus competencias con la eficacia, intensidad, complejidad y velocidad que requiere el mercado de trabajo actual y las demandas de las personas trabajadoras".

Falta de estructura

Defienden que "es inaplazable la necesidad de realizar una reforma profunda de nuestra organización en los términos pactados y que fueron objeto de una larga reflexión interna, en la que participamos directamente con nuestras aportaciones".

Entre sus quejas figura también "la inexistencia de estructura adecuada que permita una organización eficaz del trabajo, la ausencia de carrera administrativa para sus funcionarios y de unas condiciones económicas y laborales que no se corresponden con las funciones y responsabilidades asumidas desde hace años, produciéndose incluso situaciones de agravio y discriminación salarial".

Demandan también el apoyo de la sociedad y "de los responsables competentes para poder mejorar y consolidar el único servicio público existente para la protección de los derechos de las personas trabajadoras" y recuerdan que desde 1906 la Inspección de Trabajo "ha dado muestras de estar en todo momento atendiendo con gran dedicación y profesionalidad" en el cumplimiento de su labor y en la defensa de "los recursos públicos del sistema de Seguridad Social".