Medio ambiente

La falta del Plan General pone en peligro a la Estación de Telegrafía de Cabo de Palos

Dado que aún no se ha aprobado y ante la posibilidad de que decaiga la moratoría del Mar Menor, el propietario podría solicitar licencia para construir

Estación de Telegrafía de Cabo de Palos. | L.O.

Estación de Telegrafía de Cabo de Palos. | L.O. / Juan Daniel González

La integridad de la Estación de Telegrafía de Cabo de Palos corre peligro, según advierten los vecinos. Después de que su propietaria, la sociedad estatal Correos, derribara en mayo del año pasado los edificios que no estaban catalogados como bien inventariado, dañando la portada de acceso en el proceso, que sí estaba protegida, todos los partidos que conforman el Pleno del Ayuntamiento firmaron en septiembre una declaración institucional para impedir la construcción en la parcela.

Así pues, el Consistorio se comprometió a hacer valer la moratoria urbanística de la Ley del Mar Menor como garantía de la preservación de la zona hasta la aprobación del nuevo Plan General de Ordenación Urbana. La problemática que se plantea ahora, según expone el arquitecto José María Villanueva, vecino de Cabo de Palos y uno de los mayores implicados en la defensa y conservación de la edificación, es que «se aproxima la fecha de las elecciones y no tenemos de momento seguridad de que se pueda producir la aprobación inicial del Plan General de Ordenación Urbana que califique los terrenos de correos como Sistema General de Espacios Libres». Y ello porque, según explica, este proceso debe superar ciertos trámites, como la aprobación en el Pleno y el pasado jueves se celebró el último de la legislatura, por lo que habrá que esperar a la siguiente.

A su vez la moratoria del Mar Menor decae en principio el próximo 2 de agosto de 2023, tres años después de su entrada en vigor. Si bien recientemente la Asamblea Regional ha mostrado su intención de prorrogarla, «la proximidad de las elecciones impide que pueda tramitarse esta iniciativa hasta la constitución de la nueva cámara, que tendrá lugar el 14 de junio», apunta Villanueva. Y «mucho» se temen los vecinos que «en ese plazo tan reducido no será fácil tramitar y aprobar esa modificación de ley».

Los vecinos piden al Ayuntamiento que aplique el artículo 153 de la Ley del Suelo en caso de ser necesario

De este modo, se puede dar el caso de que llegue el 2 de agosto, sin haber aprobado el Plan General y la prórroga de la moratoria del Mar Menor, «por lo que nuevamente nos encontraríamos ante la situación de que Correos tendría derecho a solicitar el inicio de un expediente de un procedimiento urbanístico, puesto que es un suelo urbano no consolidado», según explica el arquitecto.

Ante esta situación, «solo queda la aplicación del artículo 153 de la ley del Suelo de la Región de Murcia, que permite suspender licencias en ámbitos concretos con el fin de disponer de tiempo para estudiar convenientemente las actuaciones a levar a cabo en la fase de redacción del Plan General», destaca Villanueva.

La declaración institucional del Ayuntamiento contempla esta alternativa, por lo que los vecinos y defensores de la estación consideran que es conveniente formular una solicitud «inmediatamente» para poder conocer la postura del Ayuntamiento.

Por su parte, desde el Consistorio aseguran que el equipo redactor del Plan General culminará y entregará los resultados del documento este mes de mayo, de modo que «esté todo preparado que el nuevo Gobierno que entre lo apruebe».

Contencioso en marcha

Cabe recordar que en estos momentos hay un proceso contencioso-administrativo abierto, que se inició en febrero de 2021, debido a que Correos quiere que todas las edificaciones del terreno dejen de estar protegidas como bien inventariado para poder derribarlas. Estas edificaciones, que datan de 1906 son: la puerta de acceso, la nave principal, la casa de máquinas y un aljibe ubicado en la parcela.

Los vecinos se opusieron en masa a este proceso, hasta el punto de acumular hasta 1.700 firmas para proteger las dependencias. En este sentido, presentaron una alegación contra el proceso. Para reforzar su postura, presentaron un informe de Jesús Sánchez Miñano, una autoridad en materia de historia de las telecomunicaciones, citado en el expediente de clasificación de parte del inmueble como bien inventariado. Sánchez Miñano, que el próximo 2 de junio tiene la vista como perito, hace referencia en su escrito a que la estación de Cabo de Palos, junto a la de El Prat de Llobregat, situada en Barcelona y que ha sido restaurada y ahora es un museo, son los únicos vestigios que quedan de la red de estaciones costeras de telegrafía sin hilos, por lo que «su conservación es una absoluta necesidad».

Los vecinos califican de «incomprensible» que, en vista de la declaración institucional del Ayuntamiento, «Correos no haya planteado un desistimiento del contencioso e iniciado conversaciones con el Ayuntamiento con el fin de formalizar un convenio urbanístico beneficioso para ambas partes».