Fernando de Mateo, director general de Lhicarsa

“Los niños de Cartagena ya saben que en el 2035 solo podrán ir al vertedero un 10% de los residuos”

Fernando de Mateo, director general de Lhicarsa.

Fernando de Mateo, director general de Lhicarsa. / Dámaris Ojeda

P. González

Su compromiso con la innovación y la optimización de recursos es clave en la gestión de la recogida de residuos y la limpieza de Cartagena. Fernando de Mateo, director general de Lhicarsa, explica las iniciativas que la entidad desarrolla y en las que prevé involucrarse. Reducción de emisiones, captación de biogás, importancia del personal… ¿Qué se espera en el futuro? Los más pequeños ya lo saben.

¿Cuáles son los valores que guían el compromiso de Lhicarsa con la sostenibilidad y la responsabilidad social en Cartagena?

Nuestro compromiso es realizar de una forma óptima los servicios que tenemos actualmente contratados en el municipio de Cartagena. Ya sabemos que hacemos la recogida de basura, la limpieza viaria, el tratamiento y la eliminación de los residuos sólidos urbanos. En esta actividad, priorizamos los requisitos y estándares que la corporación nos indica. Con el medio ambiente, la seguridad, la salud y el bienestar de los trabajadores. Además, hay que tener en cuenta que en Lhicarsa todas estas acciones e iniciativas están alineadas con la Estrategia de Sostenibilidad 2050 que tiene implantada el grupo de FCC Medio Ambiente, la cual consiste en una hoja de ruta de desarrollo de negocio a 30 años que integra unos objetivos ambiciosos y compromisos muy exigentes y de alto valor añadido para la compañía y el conjunto de la sociedad. Esto se integra en cuatro ejes direccionales: un eje medioambiental, social, de excelencia y de buen gobierno. Trabajamos en integrar estos objetivos de desarrollo sostenible en nuestro modelo de negocio para así lograr una alineación completa, entre otros, con los 17 objetivos que contempla la Agenda 2030. Y en nuestra gestión apoyamos e impulsamos estos objetivos a través de una estrategia responsable que contribuya a mantener y consolidar el desarrollo sostenible en la sociedad cartagenera.

Podría explicar en detalle algunas de las iniciativas más destacadas del Lhicarsa, como el uso de biomasa como combustible o la colaboración en las distintas campañas de reciclaje.

Tenemos instalada en nuestra planta de tratamiento, más concretamente en los vertederos, una instalación de captación para biogás: se capta a través de una red, se lleva a unos motores y se genera energía eléctrica que luego es vertida a la red mediante una serie de motores. Con esta electricidad, recuperada de los residuos y de origen renovable, estamos consiguiendo anualmente generar electricidad que sería suficiente para cubrir las necesidades de unos 3.200 hogares.

¿Cuál considera que ha sido a nivel local el impacto más significativo, tanto de estos proyectos como del resto en los que participa la empresa en esta línea?

Lo más significativo y lo más reciente ha sido la nueva inversión que ha realizado Lhicarsa en maquinaria y en equipos. Hemos comprado adquirido vehículos recolectores, lavacontenedores, barredoras, hidrolimpiadoras, sopladoras... Con esta mecanización del servicio, se ha conseguido un aumento en el rendimiento, ya que se puede abarcar una mayor superficie de limpieza. Y por otro lado, al aumentar esta capacidad de los vehículos, podemos tener un aumento en las frecuencias de trabajo de nuestro personal, principalmente del personal operario de limpieza viaria. La instalación de un mayor número de papeleras nos permite que la gente, cuando tiene el típico papelito o colilla, pueda utilizar la papelera, con lo cual ese residuo no está en el suelo, con menor impacto visual, evidentemente. También hemos aumentado el volumen de contenedores instalados en la calle, lo que nos permite que no haya basura en las zonas de acopio y que la gente tenga sitio suficiente donde depositar el residuo. Con estas medidas se produce un salto cualitativo y cuantitativo muy importante con respecto a la limpieza y a la recogida de residuos dentro del municipio de Cartagena. Aparte de esto, varios de los vehículos que se han adquirido son de propulsión totalmente eléctrica, con lo cual la emisión de partículas contaminantes a la atmósfera es cero, el ruido es prácticamente inapreciable. La pequeña maquinaria, como desbrozadoras o sopladoras, también es eléctrica, por lo que produce mucho menos ruido que la anterior, que era de gasolina.

Fernando de Mateo

Dir. General de Lhicarsa

Fernando de Mateo

¿Cómo colaboran con otras entidades tanto públicas como privadas para llevar a cabo estas y otras iniciativas?

Cuando se nos plantea cualquier iniciativa, lo que nos preguntamos es si la entidad que la propone está alineada con nuestros valores. ¿Cuáles son nuestros valores? Pues que puedan certificar que cumplen con ciertos estándares que estén relacionados con la sostenibilidad, la reducción de emisiones de carbono, la gestión responsable de los residuos y el respeto por los derechos laborales de sus trabajadores. Cuando vemos que todo eso está alineado, abrimos un canal de comunicación y de colaboración. Estos objetivos y estrategias de colaboración los podemos basar en los cuatro ejes de nuestra Estrategia de Sostenibilidad 2050. Por un lado, compartir estos objetivos de sostenibilidad, reducción de emisiones, gestión responsable de recursos o implementación de prácticas laborales justas, establecer indicadores de rendimiento que sean claros y medibles, y realizar ajustes cuando vemos que hay algún desvío. También promovemos la innovación conjunta, implementamos tecnologías más respetuosas, la optimización de los recursos disponibles y reconocer y recompensar el compromiso sostenible de los compañeros que están trabajando. Y que ese reconocimiento sea público, que no sea una cosa privada, sino que se conozca. La colaboración en iniciativas sociales y medioambientales las realizamos de manera muy diversa: aportaciones económicas como patrocinios, cesión de medios o personal para dar charlas o conferencias, o la participación de nuestro personal técnico como educadores, por ejemplo, en centros escolares. Lhicarsa se involucra con ilusión cada vez que se nos plantea un proyecto y vemos que tiene el objetivo de influir de forma positiva en la sociedad cartagenera. Participamos, por ejemplo, en grandes eventos culturales, como el Festival de la Mar de Músicas, el Festival de Cine de Cartagena, La Noche de los Museos, la Semana de la Novela Histórica o el Festival DJ Weekend. Lhicarsa colabora con Cartagena por la Caridad desde su fundación en el año 2005. También participamos con publicaciones que están relacionadas con la Semana Santa, algo muy importante dentro del sentimiento del municipio, además de convenios de colaboración con organismos para realizar prácticas profesionales no laborables, o integrando en la plantilla de Lhicarsa a personas de colectivos en riesgo de exclusión social o que tienen un difícil acceso al mercado de trabajo. Somos una empresa abierta e inclusiva y no hacemos distinción de ningún tipo.

José Ángel Espinosa, trabajador de Lhicarsa: "El día que me hicieron plantilla fue una alegría muy buena"

FOTO: Iván Urquizar | VÍDEO: Pablo González

Los empleados son una pieza clave de toda la entidad, ¿de qué manera se les involucra en estas propuestas?

Actualmente trabajan 400 personas en la empresa y son el valor más importante que tiene Lhicarsa. ¿Cómo participan? De muchas formas. Tenemos implantado un sistema de gestión del grupo empresarial que se integra como una apuesta prioritaria. Intentamos aplicar por todos los medios una norma de empresa saludable; les damos pautas de hábitos saludables; hay un procedimiento de formación continua con los trabajadores: firmamos hace ya tiempo un plan de igualdad en limpieza e higiene de Cartagena con UGT; se implantó un comité local de iniciativas sostenibles en la cual participan los trabajadores, hay un huerto ecológico donde los trabajadores plantan tomates, lechugas o lo que sea menester. Cuando tuvimos el triste episodio del COVID, había gente con necesidad y fueron los propios trabajadores los que hicieron una campaña de recogida de alimentos, y luego se encargaban de repartirlos ellos mismos o a través de otras asociaciones. También se hacen imparten cursos de igualdad, prevención, y acoso en el trabajo, comportamiento ético; se colabora con las fiestas navideñas organizadas por la Asociación de Cartagena por la Caridad; se realizan campañas de recogida de juguetes; se participa activamente en las campañas de donación de sangre con nuestros trabajadores. De alguna manera, están todos muy implicados. El día del patrón de los basureros, vamos a llamarlo así, la empresa organiza competiciones deportivas y hay una comida de hermandad.

José Antonio: "Entré en Lhicarsa porque quería trabajar y no estar por ahí tirado"

FOTO: Iván Urquizar | VÍDEO: Pablo González

¿Cómo miden el éxito de sus proyectos en términos de impacto social y medioambiental en Cartagena?

En función de su carácter y objetivo, cada proyecto tiene una forma distinta de valorar su repercusión. Cuando son medidas de carácter medioambiental, existen una serie de indicadores que nos pueden decir qué grado de objetivo hemos conseguido. Por ejemplo, en la planta de tratamiento, donde se implantó una instalación fotovoltaica de generación de energía eléctrica en la cubierta de una nave, hemos podido ver que hemos reducido un 30% el consumo eléctrico de la red y, a su vez, esto nos ha permitido medir el ahorro de dióxido de carbono emitido a la atmósfera: aproximadamente unos 88.710 kilos durante el año 2023. Son cosas que se pueden medir, hay otras que es mucho más difícil. 

Fernando de Mateo

Dir. General de Lhicarsa

Fernando de Mateo

Los pequeños tienen el poder de tomar el mando en el camino de la sostenibilidad, ¿qué os cuentan cuando visitan la planta?

Tratamos de hacer educación ambiental con los colegios desde las edades más tempranas. Participamos de forma activa en la iniciativa Tres Erres de la Concejalía de Educación, que consiste en realizar actividades formativas en el ecoparque de La Vaguada y en la planta de tratamiento. El ecoparque de La Vaguada es para niños más pequeñitos y la planta de tratamiento está más enfocada a últimos cursos de primaria. Allí se les explica todo el procedimiento, todo el proceso de recogida de residuos y, de alguna manera, les estamos inculcando a los niños desde muy temprana edad que tienen que cuidar el entorno en el que viven y que no es labor de una empresa o de un ayuntamiento, que esto es de todos. Aquí tenemos que estar todos remando en el mismo barco para conseguir un medio ambiente más respetuoso. Que la sociedad se encuentre la calle en un estado más o menos óptimo de limpieza y que los residuos estén cada uno en su contenedor. Todo esto tiene que salir desde casa. Uno tiene que separar el residuo y tiene que saber a qué contenedor tiene que ir cada uno. Los niños ya saben, porque se les explica, que tenemos un objetivo claro y perfectamente definido: en el año 2035, de todo el residuo que se genere en una ciudad, al vertedero sólo puede ir un 10%. Con lo cual, tenemos un trabajo muy duro por delante y sin ellos, que van a ser los mayores del mañana, esto va a ser un reto muy difícil de conseguir. Con ellos estoy seguro de que se conseguirá.

El alumnado de un colegio visita las instalaciones de Lhicarsa.

El alumnado de un colegio visita las instalaciones de Lhicarsa. / Lhicarsa

Y en cuanto a tecnología e innovación, ¿se integran de alguna manera en estos proyectos sociales y medioambientales?

La tecnología y la innovación es algo que tenemos en el ADN. Esta empresa, a través de FCC Medio Ambiente, ha desarrollado y patentado, por ejemplo, un chasis 100% eléctrico para servicios urbanos. Esto ya está funcionando en varias ciudades de España. Estamos también involucrados en otro tipo de proyectos para desarrollar vehículos de servicios urbanos que se muevan con hidrógeno, esta es la última tecnología que hay en el mercado y ya la hemos implementado aquí. Asimismo, hemos implantado un sistema de gestión digital de los servicios llamado VISION, en el cual van instalados dispositivos que mandan señales GPS, aparte de proporcionar otros datos. De tal manera que el Ayuntamiento, a través de su servicio de inspección, puede controlar perfectamente la realización del servicio de manera directa, y a nosotros nos proporciona otros importantes datos, como puede ser el consumo de combustible o el desgaste de ruedas y filtros, lo que nos permite optimizar la organización de los servicios. 

¿Tiene planeado que Lhicarsa se involucre en alguna nueva iniciativa en un futuro próximo?

Siempre estamos abiertos a estudiar cualquier iniciativa que se nos proponga. Hace poco salió publicado en el periódico una iniciativa que tenemos con la Universidad Politécnica de Cartagena, por la cual se está parametrizando con un modelo de inteligencia artificial la gestión del vertedero, entre otras cosas. Cuando se nos plantean iniciativas de estas características, se estudian, se valoran y si vemos que tienen una proyección interesante y positiva, siempre van a poder contar con nosotros.