Comercio

Las obras del mercado Gisbert de Cartagena arrancarán a finales de este mes

El concejal de Comercio, Manuel Padín, dijo en noviembre que el comienzo de los trabajos sería "inminente", pero finalmente la adjudicación del contrato se ha retrasado algo más de lo previsto

Fachada del mercado Gisbert.  Iván Urquízar

Fachada del mercado Gisbert. Iván Urquízar / Juan Daniel González

Las obras para convertir el mercado Gisbert en un gastromercado todavía está en proceso de adjudicación. El pasado mes de noviembre el teniente de alcalde y concejal de Turismo, Comercio, Sanidad y Consumo, Manuel Padín, anunció que los trabajos comenzarían de forma «inminente».

Finalmente, el Gobierno apunta a finales de febrero o principios de marzo como fecha aproximada, según han asegurado fuentes del Ayuntamiento, que han explicado que «son unas tres semanas de licitación y adjudicación, y posteriormente comenzarían las obras».

Estos primeros trabajos cuentan con un presupuesto base de 411.400 euros y tienen un plazo de ejecución de tres meses, de modo que, si todo marcha según lo previsto, estarían culminadas a principios del verano. La obra se centra en rehabilitar la fachada principal, que actualmente cuenta con problemas de humedades y filtraciones.

En concreto, se colocarán amplias ventanas para que se pueda ver el interior del edificio, a diferencia de como es actualmente. Con el fin de hacer más atractiva la entrada, se colocará un nuevo tipo de pavimento en la calle que se prolongará hasta la propia fachada.

Esta primera fase también incluye varias actuaciones en el interior, como su desmontaje integral, incluidas las instalaciones, la demolición de techos, tabiquería y escaleras, así como reparaciones en el forjado interior y el tratamiento de humedades en los muros para de hacerlo más diáfano. También se van a demoler rampas y alicatados y el suelo y se colocarán nuevas escaleras y rampas.

Una vez concluidos estos trabajos arrancará una segunda fase, que se basará en habilitar una zona de mesas y sillas en el interior, en la que los clientes podrán degustar los productos de los distintos puestos. De esta forma, el mercado de Gisbert se convertirá en un gastromercado, en el que los comerciantes podrán vender sus productos de forma tradicional y en el que, al mismo tiempo, vecinos y turistas podrán tomarse algo, como ocurre en espacios ubicados en otras grandes ciudades, como Madrid, Barcelona o Valencia.

Esta fase tendrá un coste de unos 700.000 euros y su plazo de ejecución rondará los 6 meses. El concejal de Comercio, Manuel Padín, afirmó durante la presentación del proyecto hace tres meses, que los cartageneros podrían disfrutar del nuevo mercado «a finales de este año», sin embargo, teniendo en cuenta la lentitud burocrática, la apertura final podría demorarse algo más, tal y como está sucediendo con el comienzo de la obra.

El Gobierno ha solicitado ayudas europeas para la reforma del mercado que suponen una subvención de 1.100.000 euros, que les ayudarán a «recuperar la primera inversión de 411.000 euros para las arcas municipales y destinar ese dinero a otros proyectos», según subrayó el edil de Comercio durante la presentación del proyecto, hace tres meses.

La iniciativa para adecuar su interior todavía está en estudio por parte del servicio jurídico. Este, impulsado por un grupo de empresarios, que fueron los que propusieron la idea de volver a darle vida al mercado, proyecta un total de 16 puestos, que se podrían unificar en función de sus necesidades, en los que se ubicarán una carnicería, un local de salazones, una frutería, una panadería y una cafetería, entre otros.

Asimismo, se ubicará el único comercio que quedaba en el mercado antes de que cerrara, una pescadería. Todos los productos se podrán comprar y degustar en el propio edificio.