Opinión | Tribuna Libre

Antonio Ballester, artista Pro-Soterramiento

El artista Antonio Ballester.

El artista Antonio Ballester. / Juan Ballester

Tal vez su última aparición pública en un acto oficial fuera la inauguración de la exposición antológica de su padre, Mariano Ballester, El pintor está pintando, en el Almudí, el 7 de julio de 2023. El comisario de aquella magna exposición, Darío Vigueras Marín-Baldo, podría dar fe de que no se prodigó demasiado. 

Antonio Ballester quería concentrarse en el tratamiento de la grave enfermedad que le ha quitado la vida, lo que llegó a confesarme personalmente (a pesar de su carácter tímido), a raíz de una consulta para un trabajo mío que quedó inédito sobre el paso de su familia en el barrio del Carmen, en donde vivieron algún tiempo hasta la muerte de su padre, en 1981. Alguna otra vez se dejó ver en actos públicos, tal vez la última en el Colegio de Arquitectos de Murcia, en el homenaje de sus amigos a Enrique Carbonel. Sin abandonar la esperanza a la que seguía amarrado de superar la grave enfermedad.

Antonio Ballester, junto a más de una cincuentena de artistas de nuestra Región, protagonizó una singular exposición en pro del soterramiento de las vías en Murcia, que generosamente colaboraron para que aquel proyecto se hiciera realidad. Fue una de las estrategias de las que nos valimos para ello, y creo justo remarcarlo en este momento, y agradecerlo de nuevo.

Arte soterrado fue el nombre de aquella muestra solidaria que ocupó tres bajos de edificios en la calle Orilla de la Vía, en donde entonces un muro, el muro de las vías, separaba barrios del sur de la ciudad de la que formaban parte, con la amenaza de que el AVE en superficie que pretendían hacernos llegar hubiera consolidado definitivamente la partición de la ciudad, como en Valladolid sucedió y fatalmente se mantiene.

Arte Soterrado

'Arte Soterrado' / Antonio Ballester

El progreso fue su obra para aquella muestra solidaria. Sin entrar en valoraciones técnicas y artísticas, ámbito para los expertos que no voy a invadir, su obra reflejó perfectamente el sueño utópico de los vecinos de levantar la barrera de las vías que partía la ciudad, apartadas en un lateral de su autorretrato (de casi dos metros y medio de altura) que mantiene entre sus manos un ‘tratado’ sobre ‘EL PROGRESO’, cuyo título aparece quebrado y casi ilegible

'El progreso'

'El progreso' / Antonio Ballester

No cabe mejor metáfora explícita para reflejar el progreso quebrado y roto que suponía la idea de la llegada del AVE en superficie, que era un verdadero retroceso, un ‘antiprogreso’, una barbarie que tú nos ayudaste a superar, y que has conseguido comprobar con tus propios ojos junto a aquel tropel de artistas solidarios que, hace casi siete años ya, pusisteis vuestra aportación y compromiso, no exento de un riego indiscutible, para que aquel sueño se hiciera realidad. Y para que el progreso quebrado de tu mural se pueda dar por superado y convertido en un progreso que no excluyó barrios ni partió la ciudad.

Aunque te nos fuiste tan temprano, y no puedas recrear aquel mural de la exposición una vez logrado su objetivo, gracias, Antonio. 

Descansa en Paz.

Suscríbete para seguir leyendo