Cartagena Artística 1890-1892

En las páginas de Cartagena Artística colaboraron importantes nombres de la cultura española: Serrano Alcázar, Eduardo Inza, Federico Torralba, Eladia Bautista, Perní García, Ángel Palacio, Andrés Blanco, Patrocinio de Biedma... Dirigía la publicación su propietario, Federico Torralba, y tuvo inicialmente la administración en la calle del Aire 20. La voluntad era editarla tres veces al mes, los días 1, 10 y 20. 

Cartagena Artística estaba dividida en secciones: filosófica, artística, poética… De hermosa cabecera, a modo de frontispicio clásico, con el nombre del periódico-revista actuando de friso adornado con esculturas haciendo las veces de metopas, para referenciar ese estilo ecléctico que, aquí, incorpora orlas y cenefas a fin de lograr la sensación de frontón de un templo antiguo. Contaba la publicación con la reproducción de magníficos grabados y fotograbados que muestraban personajes y rincones de Cartagena y otros lugares de la provincia (el arsenal de Cartagena, la iglesia del castillo de Caravaca o la rueda de La Ñora en Murcia). Trataba, además de temas literarios o artísticos, del progreso y las transformaciones y adelantos técnicos y científicos de la época. 

Víctor Balaguer alaba en sus páginas el ferrocarril como símbolo de avance industrial y tecnológico y representación de la velocidad a la que se suceden los cambios. En el número 1, en la editorial dirigida (tal como hizo en 1878 el Semanario Murciano) «Al Público», se manifiestan sus aspiraciones: «Cartagena Artística aparece en el estadío de la prensa a ocuparse tan solo de asuntos científicos, artísticos y literarios». También señala que, en lugar preferente, en las portadas de las cuatro hojas con que cuenta la publicación, aparecerán los retratos de aquellos prohombres de las ciencias y las letras de mérito y talento dignos de mención. 

En el número 20, de 20 de octubre de 1890, aparece retratada la familia de Isaac Peral; en las páginas interiores, vistas del submarino en el puerto y de la Comisión Técnica que lo tiene a su cargo, con loas de diferentes autores elogiando los logros de Peral y su creación náutica, ocupando los pliegos de un número (con tirada de 69 ejemplares impresos en la calle Cuatro Santos) a todas luces convertido en especial. 

Cartagena Artística, esmerado producto que pudiera recordarnos aquella revista señera, aparecida en 1869 y que llegaría hasta 1921, La Ilustración Española y Americana u otras publicaciones, estas sí cartageneras: Cartagena Ilustrada o, menos conocida, Carthago Moderna, publicación de 1907, de tono modernista, de ciencias, literatura, industria, comercio, navegación, arte y deportes.

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