José Luján: "Sin financiación, la LOSU es un absoluto fracaso normativo"

El seguir celebrando año tras año la excelencia académica de la comunidad universitaria en la Región de Murcia pasa por garantizar la sostenibilidad económica y de proveer de los fondos suficientes a las instituciones para que puedan afrontar con garantías el futuro del sistema.

«Sin financiación, la LOSU (Ley Orgánica del Sistema Universitario) es un absoluto fracaso normativo. El Estado y las comunidades tendrán que tomar las decisiones que sean necesarias para que no sea un papel mojado». La celebración este viernes del día de Santo Tomás de Aquino sirvió para que el rector de la Universidad de Murcia, José Luján, reivindicase uno de los asuntos que más precupan desde hace meses a la gestión universitaria y que el pasado jueves dio un giro de guion ante la insistencia de las comunidades con el Ministerio de Diana Morant.

El máximo responsable institucional de la universidad pública murciana y una de las voces autorizadas dentro del equipo directivo de la Conferencia de Rectores de las Universidades (CRUE) se refirió así a la implantación de la ley universitaria por parte del Gobierno central para el próximo curso 2024/2025.

El ministro reconoce la falta de dinero que sufren la UMU y la UPCT

Morant accedió el jueves a la modificación en la aplicación de la LOSU: las autonomías trasladaban al Ministerio su «preocupación» en la aplicación de la ley y exigían cofinanciar y flexibilizar el calendario para su implantación.

Durante su intervención en el acto académico celebrado en el salón de actos de la Facultad de Economía, el rector aprovechó la ocasión para mostrar «la inquietud y las dudas» que suscita la implementación de la nueva normativa, «especialmente aquellas de sus previsiones en materia de profesorado que deben aplicarse ya el próximo curso».

Y avisó: «Si no llega la financiación extraordinaria prometida por el anterior Ministerio de Universidades, la situación será difícilmente manejable».

Luján recordó que el anterior ministro de Universidades, Joan Subirats, ya se comprometió el pasado mes de octubre con las universidades públicas de la Región a destinar una inversión de 3.000 millones de euros para dotar a esta ley de financiación suficiente para hacer frente a las modificaciones que pretende la nueva normativa, como la estabilización de las plantillas de profesores a tiempo parcial, entre otras. Con este dinero, apuntaba Luján ante los medios, sí podría ser una buena ley.

El rector lamentó también «el hecho de que, en la definición de las más recientes medidas normativas con incidencia directa en nuestra actividad, las universidades hayamos sido oídas, pero no escuchadas».

En este sentido, hizo mención a «la confusa regulación de la inclusión en Seguridad Social de los estudiantes que realizan prácticas académicas externas o el recién aprobado proyecto de ley de enseñanzas artísticas». De la misma forma, Luján volvió a insistir en que «la magra financiación que recibimos las universidades públicas, muy lejana todavía de ‘El Dorado’ del 1% del PIB.

El rector de la UMU coincidía así con las reivindicaciones que mostraba el pasado jueves el consejero de Universidades, Juan María, y que ayer mismo volvía a repetir que la LOSU era el resultado de la aprobación de una ley «que no ha sido consensuada ni compartida con las comunidades ni con la Conferencia de Rectores de las Universidades».

«Lo que hemos requerido las comunidades al Ministerio es la necesidad de la financiación y que nos traslade seguridad», reiteró Vázquez. La Consejería de Universidades aplaudió que el Ministerio asumiese «las reivindicaciones del Gobierno regional» durante el jueves. En el transcurso de la Conferencia, se acordaron alguno de los aspectos necesarios para el desarrollo de la LOSU.

El consejero informó de que el primero es que se «creará un grupo de trabajo entre representantes del Ministerio, las comunidades, la CRUE y los sindicatos, que mantendrá su primera reunión la semana próxima para acordar el calendario real para la implantación de la LOSU».

De este modo, «se aportará certidumbre a las universidades después de meses de preocupación al entender el Ministerio la dificultad de la aplicación para el curso próximo», agregó.

Otro aspecto fue el abordar el modelo de colaboración entre el Ministerio y las comunidades «para financiar las diferentes iniciativas de la LOSU, ley que careció de la memoria económica que exigieron las universidades y la mayoría de las comunidades», indicó el consejero.

Tal y como resaltó Vázquez, la ministra Diana Morant «no ha detallado la fórmula de acompañamiento, como ha dicho en varias ocasiones, y que quedará definida en el grupo de trabajo».

«Hemos reclamado la financiación necesaria para la implantación de la LOSU debido a que no se puede hacer una ley estatal sin antes elaborar la memoria de acompañamiento necesaria para darle certidumbre a la Ley», dijo el consejero, que valoró positivamente la creación de este grupo de trabajo.

El catedrático Jaime Peris advierte de los peligros del "populismo penal"

Las togas y los birretes de distintos colores desfilaban por las escaleras que bajaban hasta las primeras filas del salón de actos de la Facultad de Economía de la UMU. Familiares, amigos y allegados de los catedráticos y alumnos universitarios se daban cita en un espacio que se quedaba pequeño para un día que servía para «reconocer a quienes destacan por su compromiso con la comunidad universitaria, o por sus valores y esfuerzo o excelencia», tal y como resaltaba el consejero de Universidades, Juan María Vázquez. También el rector Luján destacaba durante su intervención los méritos académicos que debían brillar en un día como Santo Tomás en la Universidad. 

Uno de los momentos clave de este académico fue la lección magistral que este año ofrecía a los centenares de asistentes el catedrático de Derecho Jaime Peris, que dedicó su disección a la evolución del Derecho Penal y del denominado «populismo penal» de los últimos años, lo que supone un «peligro real» para los tiempos actuales.. Peris defendió durante su intervención que a lo largo de estos años ha existido «un sinfín de modificaciones del articulado del Código Penal que responden a criterios populistas». 

El catedrático ejemplificó, entre otros, «el caso de Lola Flores, que hace menos de un año que un entonces alto cargo del Ministerio de Hacienda reconoció, como dijimos entonces los penalistas, que era un uso ejemplarizante de la reforma de los delitos tributarios», así como el papel de los medios de comunicación dentro de las actuales iniciativas legislativas. 

También aseguró que «cabe tener esperanza en la solidez del Derecho Penal», ya que «las modas pasarán como pasaron otras». Por último, resaltó que «trabajar en la Universidad sigue siendo un privilegio del que algunos hemos podido gozar».