La creación de equipos sanitarios sin médicos levanta ampollas

La puesta en marcha de equipos asistenciales sin la presencia de facultativos es un «retroceso» y pone en riesgo la «seguridad clínica». Así lo ha manifestado el Colegio de Médicos de la Región de Murcia tras conocer el nuevo proyecto anunciado este miércoles por la Consejería de Salud de puesta en marcha de tres nuevas unidades de intervención rápida del 061 en las áreas de salud de Lorca, Murcia y Cartagena-Mar Menor, unos equipos que estarían atendidos por enfermeros y técnicos, pero que no cuentan con facultativos.

Se trataría de un modelo similar al polémico sistema puesto en marcha en Madrid por la presidenta Isabel Díaz Ayuso, quien ha abierto decenas de puestos de urgencias sin facultativos. En ese caso, los pacientes son atendidos por enfermeros o mantienen consulta telemática a través de una pantalla con un médico que está en otro centro.

El consejero de Salud, Juan Jose Pedreño, ha visitado el consultorio Barrio del Francés de Puerto Lumbreras, municipio en el que se sitúa una de las tres bases móviles, donde ha destacado la labor que realizan estas Unidades de Intervención «desde la atención de avisos urgentes sanitarios que precisen de un Soporte Vital Avanzado en domicilios o en vía pública, además de apoyo a otra unidad (UME o SUAP) en caso de accidente de múltiples víctimas o varios heridos.

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Sin embargo, estas unidades no disponen de facultativos y sólo cuentan con 15 enfermeros y 15 técnicos, que están en contacto con los médicos del Centro Coordinador de Urgencias.

Pedreño insiste en que «pueden resolver situaciones de forma independiente, ya que los soportes vitales avanzados de enfermería tienen línea telefónica directa 24 horas con los médicos de sala del Centro Coordinador de Urgencias».

Pero desde el Colegio de Médicos informan de que «esta medida está muy lejos de suponer un avance para la atención sanitaria en la Región» y considera que «la creación de unidades asistenciales sin médico para dar servicio a los ciudadanos es un retroceso absoluto en la calidad de la asistencia y un peligro para la seguridad de los pacientes, que tendrán que ser atendidos por personal sanitario sin la cualificación oportuna en determinados casos».

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Además, estas unidades «crean un desequilibrio entre la población, con áreas en la que la atención estará prestada por unidades que sí cuentan con los profesionales necesarios y zonas en las que carecerán de un servicio cualificado».

Para los profesionales médicos, denunciar este tipo de situaciones en las que se merma la calidad de la asistencia «es un deber recogido en el Código de Deontología Médica, en su artículo 7.5., en el que determina que ‘siendo el sistema sanitario el instrumento principal de la sociedad para la atención y promoción de la salud, los médicos han de velar para que en él se den los requisitos de calidad, suficiencia asistencial y mantenimiento de los principios éticos’, por lo que están obligados a denunciar las deficiencias, en tanto puedan afectar a la correcta atención de los pacientes».

"No es el modelo de Madrid"

Fuentes de la Consejería de Salud niegan que el proyecto presentado este miércoles se parezca al modelo de Madrid. "No se sustituyen recursos, sino que son complementarios porque se ha comprobado que agilizan la atención integral del paciente", afirman.

Al mismo tiempo insisten en que "todo paciente que tenga que ser atendido por un médico continua recibiendo esta atención".

Estas tres nuevas unidades surgieron de forma provisional durante la pandemia y ahora se crean de forma permanente para complementar los recursos y agilizar la atención integral de los pacientes, por ejemplo con la toma de constantes, así como apoyo de las atenciones que se requieran. 

"En ningún caso sustituye a ningún otro recurso: lo que viene a hacer es complementar la actividad de las 45 unidades medicalizadas del 061, que todas ellas se mantienen", insisten desde el gabinete de Pedreño.

"Estas unidades no suplen a ninguna unidad medicalizada, sino que la complementan"

Por su parte, el director médico del 061, Lázaro Campuzano, ha asegurado que esta unidad "es una ambulancia tipo C, medicalizada, en la que el profesional de enfermería presta determinadas asistencias de forma ágil y dinámica con todas las garantías bajo la supervisión médica del Centro Coordinador de Urgencias". El equipo está formado por un técnico de emergencias sanitarias (TES) y un profesional de enfermería, su actuación siempre se realiza bajo la coordinación del médico regulador del centro. Campuzano destaca que estas unidades "no suplen a ninguna unidad medicalizada, sino que la complementan".

"Todo paciente que requiera ser atendido por un médico continua recibiendo esta atención. En ningún caso este recurso es sustitutivo, sino que es complementario a la actividad 061", añade.