La Región ha conseguido recuperar las empresas perdidas con la pandemia

La Región ha recuperado las empresas que había perdido con la pandemia. En octubre de este año había logrado alcanzar las 42.618 compañías de alta en la Seguridad Social, lo que supone un 3% más que el año anterior, según recoge el Consejo Económico y Social (CES) en su publicación Indicadores de Coyuntura Económica y Laboral. El sector servicios es el principal artífice de la creación de empresas y aporta más del 80% de las nuevas compañías, aunque también la construcción ha registrado un significativo aumento en las altas y acapara el 11%.

El informe destaca que la creación de nuevas empresas en el último año incluso ha permitido superar ligeramente las cifras de febrero de 2020, antes de que el coronavirus obligara a parar la economía y a cerrar muchos negocios que ya no pudieron volver a abrir sus puertas.

Esta cifra se acerca, además, al récord histórico de las 43.000 inscritas en julio de 2019.

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La Región había perdido unas 3.200 empresas en 2020, que bajaron la persiana a consecuencia de la crisis desencadenada por el coronavirus y las restricciones del estado de alarma. Sin embargo, la recuperación que se ha producido en el último año, de acuerdo con las cifras de afiliación a la Seguridad Social, sitúan a la Región entre las comunidades autónomas que han experimentado un mayor crecimiento, encabezadas por Baleares.

Murcia se sitúa en el segundo puesto, que comparte con Madrid.

«El sector servicios es el que más contribuye a la progresión en cifras absolutas y relativas», dado que reúne el 82% del aumento registrado entre 2020 y 2021 y alcanza un crecimiento del 3,5%», según el informe del CES.

Añade que las cifras de Tesorería General de la Seguridad Social, «que toman como referencia el agregado del Régimen General y del Régimen Especial de Autónomos, son mejores no sólo en comparación con 2020», sino también en comparación con las de antes de la pandemia.

A su vez, el empleo en este sector alcanzaba un máximo anual el pasado mes de noviembre, con 395.300 afiliados a la Seguridad Social, «por el impulso que proporcionan sobre todo las ramas de educación, transporte y comercio y a pesar de que comienzan a flaquear las actividades sanitarias y de servicios sociales».

También la construcción ha obtenido un aumento importante, ya que acapara aproximadamente el 11% de las nuevas empresas creadas y consigue un crecimiento del 3,3%. Aunque la actividad de las constructoras sufrió un gran parón debido a la caída de la demanda inmobiliaria y a la ausencia de licitación pública el pasado año, el mercado se reactivó al levantarse el estado de alarma y las instituciones públicas han vuelto a sacar contratos de obra pública, aunque no en la proporción alcanzada en 2019, coincidiendo con las campañas de los comicios locales y autonómicos.

Las previsiones del CES apuntan que «los datos sobre vivienda diagnostican una evolución más enérgica que en la obra pública, incluso en términos de recuperación de los niveles anteriores a la pandemia».

Por su parte, la industria consigue un ascenso del 2,2%, mientras que la agricultura se mantiene ligeramente por debajo de las 4.200 empresas contabilizadas el año anterior.

Los Indicadores de Coyuntura destacan igualmente el impacto que la subida de los costes de la energía, de los fertilizantes o de los productos utilizados en la alimentación del ganado tendrán en las explotaciones agrarias, que, «de no ser absorbidas por mejoras en producción física o precio, pueden traer consigo una significativa disminución de la renta agraria en 2021».

La industria muestra un mejor comportamiento y «pasa de registrar disminuciones interanuales cercanas al 17% en los primeros meses del año a un registro alcista, siquiera por una décima, en el mes de junio, y otros claramente positivos hasta anotar un 11,2% en septiembre, medio punto porcentual superior al dato de España».

La previsión a partir de ahora es que, «salvo que los recientes rebrotes de la incidencia del coronavirus ralenticen el dinamismo emprendedor, la recuperación de la actividad económica reactiva la promoción de nuevas empresas, ya por encima del número inmediatamente anterior a la declaración del primer estado de alarma y cerca de la cota máxima histórica».