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Se quedan sin combustible en su patera y llaman a Salvamento Marítimo para que los rescaten

Un ocupante telefonea para informar de que necesitaban ayuda en el mar, cerca de Cabo de Palos, y de que en la barcaza iban nueve inmigrantes, dos de ellos menores de edad

Una de las pateras llegadas recientemente a Cartagena.

Una de las pateras llegadas recientemente a Cartagena. / AYTO. CARTAGENA

Ana Lucas

Ana Lucas

Salvamento Marítimo rescataba este miércoles por la tarde a nueve inmigrantes, dos de ellos menores de edad, después de que la patera en la que navegaban hacia las costas de la Región quedase sin gasolina en alta mar.

Los hechos tenían lugar sobre las dos de la tarde. Una de las personas que iba en la barcaza telefoneó a Emergencias para alertar de que ya no tenían combustible y estaban parados en el agua. La llamada entró al 112 de la Comunidad Valenciana, pero, por la posición aportada por la persona que realizó el aviso, se percataron de que la embarcación se encontraba en aguas de la Región, concretamente cerca de Cabo de Palos, en Cartagena. La ayuda se puso en marcha.

La Salvamar Draco, embarcación que está en la base de Salvamento Marítimo de Cartagena, salió a rescatarlos. Está previsto que lleguen sobre las seis menos cuarto de la tarde a la dársena de Santa Lucía, en la ciudad portuaria. Fuentes cercanas al caso apuntaron que no es algo extraño que los propios migrantes realicen llamadas desde las barcazas (pues la mayoría de ellos lleva consigo su teléfono móvil) cuando necesitan ayuda, como es este caso.

Cuando la Draco llegó a la posición reportada por los extranjeros, embarcó a las personas y se puso rumbo a Cartagena. Una vez trasladados a tierra, los recién llegados son asistidos por personal de la Cruz Roja en el Puerto. A todos los migrantes que llegan a la Región en patera, y son interceptados, se les da la posibilidad de apuntarse al programa de acogida que tiene Migraciones. Los extranjeros que llegan en patera a la Región son custodiados por la Policía durante un periodo máximo de 72 horas. A partir de entonces, pueden moverse libremente: cabe recordar que no han cometido delito alguno, que solo han entrado en España de forma irregular, lo que sería una falta administrativa.