"Si desde Teatre nos llegan a avisar del fuego, en Fonda no habría muerto nadie"
La defensa de la discoteca donde fallecieron 13 personas cree que la encargada de la otra sala y su personal de seguridad tuvieron tiempo de alertar de que había un incendio
Tres responsables del establecimiento donde se originó el suceso ya han comparecido como investigados: el dueño se acoge a su derecho a no declarar
«Si desde Teatre nos llegan a avisar del fuego, en Fonda no habría muerto nadie». Lo tiene claro la defensa de los responsables de este local de Atalayas, uno de los dos que ardieron el 1 de octubre, en la tragedia que segó la vida de 13 personas en Atalayas.
Tanto el Grupo de Homicidios de la Policía Nacional como el Juzgado de Instrucción Nº 3 de Murcia continúan con las pesquisas para tratar de esclarecer qué pasó aquella madrugada y quién tiene responsabilidad en ello.
En cuanto a las actuaciones policiales, el gerente de Teatre, Juan Rojo Inglés; su dueño, Marcos Martínez, y la hermana de éste y encargada del local, Eva Martínez, declaraban este jueves en calidad de investigados, tal y como adelantó La Opinión.
Piden retrasar el derribo
Lo hacían en las instalaciones que el cuerpo tiene en Sangonera. Entraban a las mismas tratando de ocultar sus rostros y en compañía de su abogado, José María Caballero Salinas. Tras comparecer como imputados (el dueño se acogía a su derecho a no declarar), quedaban en libertad con cargos, igual que quedaron, la semana pasada, el dueño de Fonda y el trabajador que llevó las bengalas a Teatre.
Una bengala fría causó el incendio mortal de Atalayas
El abogado de Teatre, por otro lado, quiere que se retrase el derribo de la discoteca hasta que se persone en la misma un perito privado y realice un informe independiente al de la Policía sobre lo ocurrido.
Francisco Adán, el abogado que defiende los intereses de los propietarios de Fonda (donde fueron hallados los trece cadáveres, aunque el fuego se originó en Teatre) tiene claro que, si desde la discoteca en la que comenzó el fuego hubiesen tocado a la puerta del local colindante, se habrían salvado todas las personas, pues habría dado tiempo a desalojar los establecimientos.
Ni la encargada de Teatre ni ningún miembro de la seguridad alertaron a Fonda de lo que pasaba hasta que transcurrieron cuatro minutos, subraya el letrado.
El Consistorio "no es víctima"
Por otro lado, la jueza instructora del caso denegaba personarse en la causa, entre otros, al Ayuntamiento de la capital, informó el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Murcia.
Y no solo al Consistorio: la magistrada también ha desestimado que se personen UGT, el sindicato Manos Limpias y la Unión de Consumidores y Usuarios de España (UCE).
En el caso de la corporación municipal, «en modo alguno puede reconocerse al Ayuntamiento de Murcia su condición de víctima», subraya la jueza, según el comunicado del TSJ. Es más, tampoco puede considerarse «ni tan siquiera el daño reputacional corporativo, pues nos encontramos ante delitos en los que los perjudicados están identificados, contándose ya con la presencia del Ministerio Fiscal en defensa de la legalidad, de los derechos de los ciudadanos y del interés tutelado por la ley, y las acusaciones particulares (familiares de las víctimas) que defiende los intereses particulares de los perjudicados».
Familiares de las víctimas mortales ya habían pedido a la instructora que no permitiese al Consistorio que dirige Ballesta personarse en este asunto, ya que, consideran, es posible que algunos políticos acaben imputados. Cabe recordar que la discoteca donde se desató el fuego tendría que haber estado cerrada.
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