Seguridad

Las estafas por Internet suben casi un 40% en un año en la Región

La Comunidad registró en los seis primeros meses de 2023 un total de 6.153 ciberdelitos, 5.410 de ellos fraudes informáticos

Dos inspectores de la Policía Nacional forman a alumnos de Derecho en la lucha contra el cibercrimen

Una persona, tarjeta en mano, se dispone a comprar un bolso por Internet en la era del repunte del ciberdelito.

Una persona, tarjeta en mano, se dispone a comprar un bolso por Internet en la era del repunte del ciberdelito. / La Opinión

Ana Lucas

Ana Lucas

A más digitalización, más cibercrimen. La Policía Nacional informaba este fin de semana del resultado de la denominada operación ‘Nudo’, que se saldó con el arresto de 34 miembros de una red dedicada a las estafas informáticas. Durante la investigación, se llevaron a cabo 16 registros en la Región de Murcia y otras partes de España como Madrid, Málaga, Huelva y Alicante. Aunque el escenario del crimen de estos presuntos ciberdelincuentes era la Red de Redes, en sus viviendas tenían objetos sospechosos bastante analógicos: una catana, dos armas de fuego (simuladas), un bate, 80.000 euros en efectivo y vehículos de alta gama.

Los investigadores indicaron que estos cibercriminales manejaban datos de cuatro millones de personas. Fuentes policiales explican que esto es un riesgo de por sí: por ejemplo, aunque no se hagan cargos a la tarjeta de alguien, si hipotéticamente se han robado datos a esta persona, hay que seguir en alerta. En el supuesto de que los ciberdelincuentes cuenten, por ejemplo, con el mail, pueden dedicarse al phishing, haciéndose pasar por el banco u otra empresa, para engañar al usuario y que le proporcione sus claves con correos fraudulentos

La Policía recuerda siempre lo mismo: el banco no solicita nunca datos sensibles como el PIN o el CVV (el número de tres dígitos ubicado en la parte trasera de la tarjeta) por mail o SMS.

La Región de Murcia registró en los seis primeros meses de 2023 un total de 6.153 ciberdelitos, de los cuales 5.410 fueron estafas informáticas. En el primer semestre de 2022 se contabilizaron en la Comunidad 4.608 infracciones penales cometidas en Internet (de ellas, 3.916 estafas), según los datos que maneja Interior.

De acuerdo a estas cifras, la ciberdelincuencia aumentó en un año un 33,5% en la Región. Más crecieron las estafas informáticas: un 38% de 2022 a 2023

En la Comunidad se cometieron de enero a junio de 2023 un total de 36.077 delitos de todos los tipos. Se lleva la palma la ciberdelincuencia, solamente superada por los hurtos, de los cuales se contabilizaron 8.321 en un semestre. El tercer lugar, los robos con fuerza, que fueron 2.738.

El ciberestafador se valdrá de todo tipo de estratagemas para robar a su víctima, también del chantaje

«La ciberdelincuencia implica la realización de actividades delictivas a través de medios digitales, como robo de datos, fraude en línea, malware, secuestro de datos, ciberacoso, ataques informáticos, difusión de contenido ilegal, amenazas, actividades de hacking ilegal o venta de información robada», destacan policías nacionales especializados en esta lucha.

Envíos masivos de mail o SMS

En una sociedad cada vez más dependiente de la tecnología, los cibercriminales bombardean a sus víctimas con correos electrónicos o SMS fraudulentos. No mandan uno solo: hacen envíos masivos, explican miembros de los Cuerpos de Seguridad especializados en la lucha contra el cibercrimen. Pese a que a los ciudadanos se les advierte de forma constante de que no han de abrir esos mensajes de texto sospechosos, siempre hay quien pica

De hecho, ha Policía y la Guardia Civil siguen viendo casos de gente que cae en los timos de las herencias de príncipes extranjeros. Como indicaba a La Opinión recientemente Juan Salom, coronel jefe de la Unidad de Coordinación de Ciberseguridad de la Guardia Civil, «mucha gente no denuncia que le ha pasado esto: no denuncia por vergüenza». 

Expertos del Grupo de Ciberdelincuencia de la Policía Nacional y de los equipos de Investigación Tecnológica y Arroba de la Guardia Civil en la Comunidad coinciden en que «el número uno de los delitos, a mucha distancia, es el económico». El ciberestafador se valdrá de todo tipo de estratagemas para robar a su víctima: bien tratará lograr el número de tarjeta de crédito o bien información personal con la que chantajearle y pedirle dinero a cambio de no hacerla pública.

"No hay alarma social"

El término ‘scam’ (estafa, en inglés) es un paraguas bajo el cual se resguardan distintas modalidades de engaño, tales como el phishing, el vishing o los ‘romance scams’. En los cuales también sigue picando la gente porque, como apuntaba el citado Salom, «si alguien está falto de afectividad, va a encontrar una persona que le va a engañar».

Agentes destinados en la Región apuntan que, pese al repunte de la ciberdelincuencia que se está produciendo, «no existe una alarma social» al respecto.

«No son ladrones que hagan ruido: ‘trabajan’ desde sus casas, no se les ve en la calle, no gritan ni destrozan escaparates para robar», comentan estos policías, que consideran que esta ‘discrección’ da lugar a que los ciudadanos «no sean conscientes de la epidemia de cibercrimen que se está produciendo, y de que ellos pueden ser perfectamente víctimas en cualquier momento». 

Taller en la facultad

‘Cibercrimen y sus riesgos, perspectiva jurídica’ es el título del taller que dos inspectores de la Policía Nacional en la Región de Murcia impartirán este martes, en el marco de las jornadas ‘El Derecho ante la ciberseguridad: reflexiones, retos y oportunidades’. La actividad se enmarca en la Cátedra Fundación Integra sobre Identidad y Derechos Digitales de la Universidad de Murcia.

Tal y como avanzan desde la organización del taller, destinado a estudiantes de Derecho, «el avance tecnológico tiene un impacto significativo en la sociedad, con beneficios evidentes, pero también riesgos, especialmente si no se toman medidas de seguridad adecuadas». Más en una sociedad en la que es raro que alguien no tenga teléfono móvil o un PC conectado a Internet.

La Policía y la Guardia Civil siguen viendo casos de gente que cae en los timos de las herencias de príncipes extranjeros

«Estos delitos digitales representan una creciente amenaza que requiere de las medidas de seguridad adecuadas de aplicación de la ley y concienciación para prevenir y combatirlos», detallan los organizadores, que añaden que «en este contexto, la ciberseguridad desempeña un papel crucial en la protección de sistemas, redes, datos y usuarios contra estas amenazas cibernéticas». En este sentido, «este taller tiene como objetivo aumentar la conciencia de los participantes sobre los riesgos asociados a la ciberdelincuencia en un mundo cada vez más digitalizado». 

«Para ello, contamos con la colaboración de la Policía Nacional, que aportará el enfoque práctico necesario para comprender cómo hacer frente a estas amenazas. Desde el punto de vista profesional, los participantes obtendrán una comprensión más profunda de los desafíos que presenta la seguridad cibernética y aprenderán cómo identificar posibles situaciones de riesgo», concretan.

Marcos Castro, delegado de Patrimonio Histórico, en dependencias policiales en Sangonera.

Marcos Castro, en dependencias policiales en Sangonera. / Juan Carlos Caval

Los ponentes serán el inspector jefe Marcos Castro, jefe de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta, y el también inspector José Francisco Verdejo, jefe del Grupo de Ciberdelincuencia.

Consejos: doble autenticación para autorizar pagos y no guardar la tarjeta

 Sentido común. Es la premisa que sugieren desde la Policía a la hora de comprar por Internet. Por ejemplo: comprobar que la tarjeta tenga activada la doble autenticación para autorizar los pagos, ya sea a través del teléfono o la aplicación del banco. Esto es, que la web te redirija a la página de la entidad bancaria, donde te pedirá que teclees un código si es que estás autorizando la compra. Por otro lado, se recomienda no tener apuntadas las claves: ni en un documento en el ordenador ni en el navegador. Es una opción que Google ofrece: '¿Desea guardar esta tarjeta para futuros pagos?', pregunta. La respuesta es no, aunque haya que volver a rellenar formularios.

Como siempre, se aconseja que se desconfíe de ofertas excesivamente baratas. Además, dado que la app está al alcance de la mano, no está mal revisar de vez en cuando el extracto del banco, para detectar posibles cobros indebidos.