Semana Santa

El viento obliga a recortar el itinerario de la procesión marraja de la Vera Cruz

Las fuertes rachas de viento obligaron a los marrajos a acortar el recorrido de la procesión pasando desde la Plaza de San Sebastián directamente a la Calle del Aire

Imagen de las Santas Mujeres de Cartagena

Imagen de las Santas Mujeres de Cartagena / Iván Urquízar

Pablo Molina

Austeridad y recogimiento marrajo tras la muerte de Cristo en la cruz. La Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno sacó a las calles de Cartagena las imágenes que componen la procesión de la Vera Cruz, la última para la cofradía en la Semana Santa cartagenera.

Las condiciones climatológicas volvieron a plantear dificultades, con la presencia de nuevo de rachas de viento. Ante esta situación, la cofradía marraja decidió acortar el recorrido para sortear la Calle Mayor y la calle Cañón, y evitar que los tronos y capirotes queden expuestos a los fuertes vientos del puerto. Los penitentes presentaban muchas dificultades para desfilar con sus hachotes y mantener de forma correcta sus capuces. Los hachotes de luces de cera aparecían completamente apagados desde la calle Santa Florentina cuando ya se dirigían hacia la Iglesia de Santa María de Gracia.

Algo único en esta procesión es la salida de la agrupación del Santo Sudario. Este trono está compuesto por una réplica del Sábana Santa que podemos ver en Turín, simbolizando la inminente resurrección de Cristo.

La imagen de las Santas Mujeres efectuó su salida desde el Rectorado de la Universidad Politécnica de Cartagena, situado en la calle San Diego. En el recorrido las acompañó Sergio Amat, vicerrector de Estudiantes, Cultura y Deportes de la universidad, simbolizando esa unión con la UPCT. El trono está compuesto por las imágenes de María de Cleofás, María Magdalena y la Soledad de los Estudiantes que presentaba una importante modificación en sus manos, en posición de rezo, recuperando su imagen original.

El trono de las Santas Mujeres dejó atrás la puerta de la Misericordia y emprendió su camino por las calles San Diego y Duque para llegar a la calle Caridad. En la plaza del Risueño, el trono llevado por 140 mujeres se incorporó a la procesión con el resto de los tronos, siendo una de las imágenes más singulares de la Semana Santa de Cartagena. Justo detrás de ellas, la imponente imagen del trono del Santo Amor de San Juan en la Soledad de la Virgen, grupo de José Capuz, Posteriormente, pudimos ver una de las imágenes principales de esta procesión: la Vera Cruz, que en su interior posee un lignum crucis, es decir, uno de los fragmentos de la cruz en la que Cristo fue crucificado.

La imagen de la Santísima Virgen de la Soledad de los Pobres cerraba la procesión, una talla que muestra a una madre rota por el dolor de la muerte de su hijo. El desconsuelo es visible en su rostro, con la mirada fijada en sus manos, entrelazadas y pegadas a su pecho. La talla destaca notablemente en un trono adornado de forma austera con un sencillo adorno floral.

El piquete de Granaderos escoltó a la imagen de la Soledad de los Pobres, descubiertos y con el fusil a la funerala, en señal de duelo por la muerte de Cristo.

A su recogida en la Iglesia de Santa María de Gracia se le cantó la tradicional Salve cartagenera, cerrando las participaciones marrajas de la Semana Santa de Cartagena en el presente año.