Los principales partidos democráticos del País Vasco han rechazado la oferta de la izquierda abertzale de iniciar un nuevo proceso de diálogo entre el Gobierno central y ETA para un proceso de paz. Así, el portavoz socialista Juan Antonio Pastor cree que Batasuna "no tiene ninguna credibilidad"; el presidente del PP, Antonio Basagoiti dijo que se trata de una "estafa"; mientras que el alcalde de Bilbao Iñaki Azkuna señaló que la izquierda radical debe "desprenderse de sus primos" y "decir que no a la violencia".

Tras conocer la propuesta de la izquierda abertzale de abrir un nuevo proceso de negociación entre ETA y el Gobierno "en ausencia total de violencia y sin injerencias", el portavoz del PSE, José Antonio Pastor, afirmó que esta propuesta no tiene "ninguna credibilidad, mientras ETA no desaparezca definitivamente y entregue las armas". Así, Pastor indicó que el documento "suena a música vieja y antigua, a aquellas palabras de Arnaldo Otegi en Anoeta, que ya sabemos lo que dieron de sí posteriormente".

"No dicen nada que no hubieran dicho hasta ahora y todos sabemos lo que dan de sí las palabras que pronuncia esta gente. Por tanto, no tendrán ninguna credibilidad mientras ETA no desaparezca definitivamente y entregue las armas", insistió. Todo lo demás, según dijo, son "cantos de sirena, tratar de engañar a la ciudadanía, de tenernos entretenidos con declaraciones que no van a ningún sitio, porque ellos son los primeros en saber perfectamente que ese camino que dicen querer recorrer, no llega a ninguna parte".

Pastor reiteró que "quien realmente tiene en su mano la llave de la solución del conflicto es ETA, desapareciendo definitivamente de nuestras vidas". "Mientras eso no se dé, todo ese mundo que se reclama de la izquierda abertzale, no tendrá nunca ninguna credibilidad", aseveró. "No hay escenario posible de negociación que pueda ser similar al que se produjo en otras ocasiones", garantizó Pastor, quien añadió que "ese camino lo han arruinado en tres ocasiones, está definitivamente cerrado y lo único que tienen que hacer es desaparecer".

En esta misma línea se situó el presidente del PP del País Vasco, Antonio Basagoiti, quien se pronunció en la convención de la formación al señalar que esta oferta es una "estafa" de la izquierda abertzale. "La estafa se produce ahora porque están muy nerviosos, en la ruina, porque se acercan las municipales y no pueden tener ni concejales, ni alcaldes ni diputados forales", subrayó.

PNV: "No tienen credibilidad"

Por su parte, el dirigente del PNV, Andoni Ortuzar, aseguró que la izquierda abertzale "ha perdido toda la credibilidad que tenía" y "lo que debe hacer es decir a ETA que esto -la violencia- se ha acabado". En la celebración del día del batzoki de Matiko en Bilbao, Ortuzar explicó que "la paz a Euskadi se trae muy fácil: con que ETA diga que esto se ha acabado, viene la paz a Euskadi. Y la izquierda abertzale le tiene que decir a ETA que su tiempo se ha acabado, que las pistolas ya no sirven", añadió.

El líder del PNV vizcaíno indicó que las pistolas "no han servido nunca", ni tan siquiera contra la dictadura, pero "ahora menos que nunca". Asimismo, explicó que si la izquierda abertzale ilegalizada y ETA dicen que "la violencia se ha acabado de una vez y para siempre", entonces "todo será posible y estaremos preparados para hablar". "No vamos a caer en esos cantos de sirena de la izquierda abertzale, han perdido toda la credibilidad que tenían. Hoy debiera de ser fácil para ellos salir del lío en el que están ubicados, es muy fácil, es dar un paso al frente, es decirle a ETA que esto se ha acabado", añadió.

Por su parte, el alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, también denunció que, "mientras haya alguien con escolta, en este país seguirá la violencia", por lo que "la izquierda radical tiene que dejar, tiene que desprenderse de sus primos, tiene que decir que no a la violencia". "Nos han hecho mucho daño. Los últimos 40 años nos han hecho ser una calamidad, la violencia ha sido la desgracia mayor de este pueblo, nos han destrozado muchas veces el discurso y a los que más daño nos han hecho ha sido a los nacionalistas democráticos, porque muchas veces, encima de un cadáver, no hemos podido decir lo que teníamos que decir", añadió.