Guerra abierta en San Javier entre el PP y Pleamar

Las relaciones en San Javier entre el Partido Popular y Pleamar nunca habían estado tan tirantes. Este martes, el alcalde del municipio, José Miguel Luengo, tuvo que ir a declarar a los juzgados por una denuncia por amenazas al presidente del partido municipalista, Manuel Reyes, durante la jornada electoral del 28 de mayo.

La vista oral se produce después de que el Grupo Municipal del PP haya pedido la dimisión «inmediata» de la concejal de Pleamar Sandra Martínez por la construcción ilegal de una vivienda. Ya es casualidad. 

Realmente, todo empezó días antes del 28M, cuando Pleamar anunció que llevaría a la Fiscalía las supuestas irregularidades en el proceso de adjudicación del servicio público de abastecimiento de agua y alcantarillado en San Javier, uno de los contratos más cuantiosos del municipio: 247 millones de euros para 20 años.

La Fiscalía vio indicios de prevaricación tras investigar la intervención de la consultora Ingeagua en el concurso que ha ganado la compañía Aqualia. Según indicó, esta consultora, «no solo redactó las condiciones del contrato, sino que también valoró las propuestas presentadas». 

«La política tiene un límite y la has sobrepasado. Voy a ir a por ti, a por tus propiedades y a por la farmacia de tu esposa», fue la presunta ameneza del alcalde

Fue en la jornada electoral, cuando Luengo y Reyes coincidieron en el Parque Almansa de San Javier. Según cuenta el denunciante se acercó al alcalde para saludarle, dentro de la «cordialidad democrática» de ese día y este se dirigió a Reyes «entre insultos y amenazas».

«La política tiene un límite y la has sobrepasado. Voy a ir a por ti, a por tus propiedades y a por la farmacia de tu esposa», dice el presidente de Pleamar que le dijo. Reyes, que se pregunta por qué las cámaras de seguridad del lugar ese día no funcionaban, considera que la reacción se debe a la denuncia interpuesta contra él días antes. E indica que si el alcalde se hubiera disculpado, habría retirado la denuncia.

Distinta versión tiene Luengo. «Nosotros entendemos que fue para desvirtuar o tratar de influir en plena jornada electoral sobre el resultado, ya que puso una denuncia a las 17 horas que no se correspondía con nada de lo que había sucedido», contó Luengo a su llegada a los juzgados.

Durante su declaración en el Juzgado mantuvo que Reyes presentó la denuncia «con un fin espurio». Es más, el primer edil manifestó que a las 18 horas «ya estaba corriendo la noticia por medios de comunicación y redes sociales, antes de que cerraran los colegios electorales». Por tanto, el PP de San Javier entendió desde el primer momento que se trataba de «una maniobra» para influir en el resultado. 

"Concejal infractora"

Pero si la Justicia investiga a Luengo, menos cierto es que otros problemas se ciernen sobre Pleamar. Como informó La Opinión la semana pasada, la concejala Martínez Blázquez ha sido sancionada con más de 17.500 euros por una infracción urbanística grave, ya que el Ayuntamiento considera que construyó una vivienda de forma ilegal. Además, deberá demoler la edificación.

Fruto de la sanción, durante el pleno municipal del 19 de octubre, el portavoz del PP, Héctor Verdú, pidió la dimisión de la concejal. A través de un comunicado, el Partido Popular de San Javier declaró ayer que «los representantes públicos deben de ser ejemplo de cumplimiento de la legalidad, siendo intolerable la actitud de la concejal de Pleamar, considerando que no puede seguir ni un minuto más sentada en el Salón de Plenos del Ayuntamiento».

La «concejal infractora», añaden, «no puede estar votando acuerdos para los sanjaviereños si es ella en primer lugar la primera que incumple la ley».