Política

La campaña para "derogar el sanchismo", el gran error del PP que movilizó a las mujeres en su contra

La III Encuesta Nacional de Polarización Política del Cemop muestra cómo el marco de los populares generó más apoyos en Vox, no sirvió para atraer socialistas y generó "miedo" entre la población progresista

Juan José García Escribano e Ismel Crespo en la UMU.

Juan José García Escribano e Ismel Crespo en la UMU. / J.F.C.

Jaime Ferrán

Jaime Ferrán

Al Partido Popular le salió el tiro por la culata durante la campaña electoral de las elecciones generales del 23 de julio. Lo apostó todo por el marco "derogar al sanchismo" pero, como afirma el investigador del Centro de Estudios Murciano de Opinión Pública (Cemop), Ismael Crespo, "funcionó de manera incorrecta a sus intereses, sobre todo en lo que respecta a las mujeres de 25 a 40 años".

La III Encuesta Nacional de Polarización Política de este equipo ligado a la Universidad de Murcia afirma que la propuesta de "derogar el sanchismo" funcionó mejor entre los votantes de Vox que entre los populares. No solo eso, apenas sirvió para atraer a socialistas dudosos, como buscaba el líder de la formación, Alberto Núñez Feijóo. "Acabó funcionando como un elemento de amenaza que despertó reacciones adversas entre los ciudadanos progresistas, especialmente entre las mujeres", dice en el informe.

En este sentido, los hombres se mostraron 9 puntos más favorables a "derogar el sanchismo", un 35%; mientras que en las mujeres solo el 29% 'compraron' el tique del PP.

La encuesta muestra cómo el 23J hubo dos marcos: el de los populares, anteriormente citado, y el del PSOE, que versaba sobre "para la ola reaccionaria". El problema con "derogar el sanchismo" es que tiene un "doble componente", explica Crespo, ya que, además de sacar a Sánchez del Gobierno, persigue también "derogar sus políticas".

"Fue entendido como una amenaza que favoreció más a la izquierda que a la derecha porque generó miedo, especialmente a las mujeres", insiste el experto, que añade que, "curiosamente, quitando la Ley Trans, el apoyo a las políticas aprobadas por Sánchez la anterior legislatura es superior al 55% entre la población, mientras que el rechazo es menor al 25%".

El nuevo papel del género

Crespo destacó que la importancia del género podría provocar un nuevo "clivaje político" a la hora de votar. "Votamos por ideología o por territorialidad" en España, recuerda el experto, pero cada vez más se atisban diferenciaciones de género en las elecciones.

Las mujeres muestran una mayor afinidad hacia Pedro Sánchez (30,9%), seguido de Alberto Núñez Feijóo (25,1%), Yolanda Díaz (21,1%) y a una considerable distancia se sitúa el líder Vox, Santiago Abascal (4%). Los hombres, sin embargo, muestran mayores apoyos hacia el líder conservador, Alberto Núñez Feijóo (27,9%), seguido de Pedro Sánchez (23,6%) y Yolanda Díaz (15,6%), y muestran mayor adhesión hacia Santiago Abascal (10,5%) que las mujeres.

Este estudio se llevó a cabo durante la campaña de las elecciones generales del 23J, e incluye 1.223 entrevistas mediante sistema de CATI con una muestra representativa de la población española. 

Peligro: aumento de ideas antidemocráticas con alta polarización

Desde la última encuesta del Cemop se explica que «los ciudadanos más polarizados afectivamente tienden a apoyar en mayor medida el incumplimiento de las normas democráticas si esa transgresión supone una ventaja para sus intereses y afinidades partidistas». Así ocurre en sociedades altamente polarizadas. El Cemop lanzó una batería de preguntas al respecto y, como explica el investigador Ismael Crespo, los españoles muestran de media un apoyo bastante elevado a la visión que sostiene que, cuando el país está en peligro, es preferible tener líderes fuertes que actúen con decisión, aunque ello suponga alterar los procedimientos democráticos habituales (media de 6,2 en una escala 0-10), seguida del apoyo a prohibir que aquellos partidos que defienden «ideas ilegítimas» se puedan presentar a las elecciones (6,0).