El Cartagena Jazz Festival regresa tras un año de parón obligado por la pandemia de coronavirus, y lo hace presentando en la ciudad trimilenaria un cartel en el que artistas locales, nacionales e internacionales conviven para ofrecer a los asistentes un producto jazzístico y musical de calidad.
La programación de la 40 edición del Cartagena Jazz Festival se inaugura esta misma noche, a las 21:30 horas, con la actuación de Pedro Núñez Quintet, un grupo con raíces cartageneras que se mueve en el jazz más experimental, y donde la música gira en torno a la conversación entre sus componentes. Será en el Mr. Witt Café, que durante estas tres semanas de festival acogerá, cada jueves, un pequeño ciclo con agrupaciones cartageneras que han tenido que desarrollar sus carreras musicales fuera de España.
Mañana, a las 20:30 horas en el Auditorio El Batel, será el turno de Noa. La cantante israelí presenta Afterallogy, su último proyecto, un disco compuesto por 12 clásicos del jazz, entre los que podemos encontrar estándares como My funny Valentine, Oh Lord o Anything goes, realizado junto a su inseparable guitarrista Gil Dor.
Al día siguiente, 6 de noviembre, serán dos las actuaciones enmarcadas en el Cartagena Jazz Festival. La primera, a las 12:30 horas en la Terraza de la Muralla de El Batel, donde la violonchelista y cantante brasileña Dom La Nena presentará por primera vez en España su disco ‘Tempo’, que refleja a la perfección su carácter fresco.
La segunda actuación, uno de los platos fuertes del festival, correrá a cargo de Martirio y Chano Domínguez, que interpretarán a las 20:00 horas en el Nuevo Teatro Circo temas tan universales y conocidos como 'Duerme negrita', 'Vete de mí', 'Ay amor' o 'Alma mía'. El gaditano y la onubense llenan con creces el vacío que ha dejado en la programación Madeleine Peyroux, conocida como la gran dama del jazz mundial, quien anunció recientemente la suspensión de toda su gira europea.
María Yfeu, una de las voces más llamativas e interesantes del circuito independiente español, cerrará la semana, ese mismo domingo, a las 12:30 en la Terraza de la Muralla de El Batel, haciendo a los asistentes viajar al pasado y conmoviéndoles con cada una de sus canciones, en las que se puede apreciar un claro derroche de tradición vintage.
