Patrimonio

El yacimiento arqueológico de Santa Clara, en Lorca, podría ser visitable en menos de 5 años

Tras casi veinte años, el Ayuntamiento ha iniciado los trámites para urbanizar la zona, que quedaron paralizados al aparecer restos de talleres de alfarería romanos

La construcción de los edificios proyectados contempla la conservación de los restos en un sótano y la cesión de un espacio al Ayuntamiento para la musealización del lugar

Los restos, desde la parte superior de la Fuente del Oro.

Los restos, desde la parte superior de la Fuente del Oro. / Daniel Navarro

Daniel Navarro

Daniel Navarro

La zona de la avenida de Santa Clara podría convertirse en una de las atracciones turísticas más importantes de la Ciudad del Sol, gracias al yacimiento hallado hace cerca de 20 años. En aquel momento, los operarios que llevaban a cabo los trabajos previos a la urbanización de la zona descubrían una serie de restos arqueológicos que obligaban a detener las obras. Poco después, el Servicio de Patrimonio Histórico de la Dirección General de Bellas Artes y Bienes Culturales de la Región de Murcia, emitía un informe en el que, tras la intervención arqueológica correspondiente, ordenaba "la conservación visible y visitable" de los mismos "mediante su integración en el futuro edificio".

Concretamente, los hallazgos se componen de varias instalaciones de producción alfarera de diferentes épocas, abarcando desde la Roma altoimperial (siglos I-II d.C.) hasta la época moderna (s. XVII-XIX), pasando por la dominación Almohade (s. XII-XIII), que desde entonces permanecen cubiertos, a la espera de su recuperación. No obstante, parece que la espera llegará a su fin en los próximos años pues, tras la paralización de los trabajos a raíz de la resolución autonómica, en los últimos meses se han vuelto a poner en marcha.

Según podía conocer esta Redacción, la Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Lorca ha aprobado el avance para la modificación del plan especial de ordenación urbana de la Unidad de Actuación 38, nombre que recibe la parcela, a solicitud de las empresas promotoras de la obra. Preguntada al respecto de tema la concejala de Urbanismo, María Hernández, confirmaba el inicio de los trámites, situando en el año 2029 la finalización de las obras. "Todo este proceso permitirá a los promotores pedir una nueva licencia de obras, que contemple los restos arqueológicos en el sótano y el aparcamiento en superficie, tal como establece la normativa", explica la edil.

Al respecto de la parcela, de 1.462 metros cuadrados, contará con dos manzanas de edificios y con una calle de nueva apertura, que unirá la avenida de Santa Clara con el 'callejón de los frailes', conectando la zona con La Alberca. Los edificios, que podrán tener 6 alturas como máximo, albergarán unas 35 viviendas, según las estimaciones de la responsable de Urbanismo. "En el proyecto se contempla la conservación de los restos y la construcción y posterior cesión al Ayuntamiento de un local con acceso independiente al bloque de viviendas para poder hacer visitables los restos y proceder a su musealización", abunda Hernández. En este sentido, destaca además que la Consejería de Cultura ya ha dado su aprobación al proyecto, aunque aún resta el visto bueno de la Confederación Hidrográfica del Segura, debido a su cercanía con el cauce del Guadalentín.

Otros restos en el lugar

A escasos metros de estos restos, se encontraban en el año 2015 los restos de unos baños romanos, tras la demolición de varios edificios como consecuencia de los terremotos de mayo de 2011, aunque en esa ocasión las autoridades autonómicas decidían conservar los restos, pero no imponer la visitabilidad de los mismos. Y no son los únicos. De hecho, según las estimaciones de la dirección general de Bellas Artes y Bienes Culturales, de los aproximadamente 2.700 yacimientos arqueológicos que hay registrados en la Comunidad Autónoma, más de 500 se encuentran repartidos por el término municipal de Lorca.

Del mismo modo, muy cerca se sitúa la Fuente del Oro, que desde su rehabilitación en el año 2017, se ha convertido en una parada habitual de los turistas que visitan la Ciudad del Sol para conocer el extenso patrimonio de la misma. Del conjunto hidráulico, recuperado y abandonado tras los daños de la riada de octubre de 1973, destaca que, según la tradición, antaño contaba un especial protagonismo en la noche de San Juan, mientras las hogueras ocupaban las calles de la ciudad, era habitual que los vecinos acudieran a ella para echarse agua a modo de baño. Se atribuía a ese remojo la facultad de dar salud para todo el año y, especialmente, contra las enfermedades cutáneas.

Su rehabilitación llevaba a crear un espacio a modo de plaza con dos accesos. El primero, en rampa, para hacerlo accesible, y el segundo a modo de escalera que se convierte en una especie de graderío para acoger público cuando se realizan actos multitudinarios en el lugar. También se creaba un jardín vertical en el que predominan las plantas aromáticas.

La Fuente del Oro, o Caños de Cerón, era un lugar al que acudían los lorquinos para coger agua para llevar a sus hogares. Era también abrevadero para los animales, como muestra una fotografía de 1925 de Pedro Menchón que se conserva en el Archivo Municipal Juan Guirao García. Algunos sitúan sus orígenes en la época musulmana, aunque la primera cita documental aparece en el Privilegio del rey Alfonso X, en el año 1269, por el que concede las aguas de la fuente al Concejo lorquino.

El monumento ha sufrido a lo largo de la historia daños con cierta frecuencia, ocasionados por las grandes riadas registradas por el Guadalentín. El ‘Diluvio’ de 1568 y las riadas de 1691 y 1701, obligaron a rehabilitarlo. La última, en octubre de 1973, que la dejaba inservible hasta que se llevó a cabo su recuperación hace seis años. Entonces, el espacio que la rodea se cubrió de cantos rodados, similar al aspecto que lucían en su época muchas calles de la ‘vieja ciudad’. Se recuperaron los caños y se iluminó todo el conjunto.