El compañero del muerto por golpe de calor explica que estuvieron horas trabajando en un invernadero de tomates de Mazarrón

La Guardia Civil no descarta que el hombre de 42 años muerto por golpe de calor en Mazarrón estuviese trabajando, indican fuentes cercanas al caso. Vecinos aseguran que el varón, que tenía esposa y dos hijos en Marruecos, iba cada mañana a buscar trabajo en invernaderos de la comarca. Además, aunque vivía en un edificio ubicado en una de las principales arterias del pueblo, se desplomó en la calle de la pedanía de La Majada. Y lo que se trata de aclarar es si, antes del desmayo mortal, estaba trabajando en un invernadero de la zona.

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Según explicó el compañero del finado en su declaración, ese martes estuvieron desde las ocho de la mañana hasta las doce y media de la tarde en el tajo, que luego pararon y a las cuatro y media de la tarde reanudaron la labor. Al poco, el hombre comenzó a sentirse indispuesto. Tanto, que salió del invernadero. Su compañero salió también, para ver cómo se encontraba su compatriota, al cual acompañó a una zona de sombra. Ahí el hombre fue empeorando, hasta que se desplomó, hasta perder la consciencia. Fue entonces cuando pasó un vecino, que, al ver el estado del hombre, llamó al 112.

Al lugar se movilizaron agentes de la Policía Local, así como una unidad movil de emergencias (UME) cuyos sanitarios trasladaron al hombre al Santa Lucía de Cartagena, donde llegó en estado crítico. Horas después, no pudo sobreponerse y pereció.

Los restos mortales fueron trasladados a la sede que tiene en Cartagena el Instituto de Medicina Legal, para que sea la autopsia la que corrobore de qué murió el vecino. Fuentes cercanas apuntaron que, a falta de los resultados definitivos de la autopsia, la primera teoría es que se trata de un fallecimiento por golpe de calor. Algo que confirmó este jueves la Consejería de Salud. El primero de este año en la Región.

De confirmarse que el hombre estaba trabajando en un invernadero, el caso, sería similar al de Eleazar Blandón, el jornalero que murió en agosto de 2020 tras sufrir un golpe de calor mientras trabajaba en el campo y no recibir asistencia sanitaria a tiempo. Este asunto continúa en instrucción.

Se da la circunstancia de que el martes fue el primer día que la Comunidad murciana fue golpeada por el anticiclón Caronte, que disparó el mercurio en los termómetros y dejó una sensación asfixiante, de no poder respirar.

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