Trastorno del espectro autista

Las personas diagnosticada con trastorno del espectro autista (TEA) se consideran dentro del sistema educativo como alumnado con necesidades educativas especiales derivadas de un tipo de discapacidad, que se caracteriza por una serie de síntomas o características: estereotipias, dificultad en la comunicación verbal y no verbal, falta de contacto visual, intereses peculiares y repetitivos, dificultades con la expresión y la comprensión de las emociones, falta de empatía, dificultades en planificación y organización, rigidez mental, sensibilidad a ciertos estímulos, pensamientos recurrentes y obsesivos y también, en algunas ocasiones, puede ir acompañado de discapacidad intelectual. No todos los niños cursan los mismos síntomas, ni con la misma gravedad, por ello se denomina espectro, pues hay una gran diversidad de casos dentro del mismo trastorno.

Con respecto a la Educación Infantil, según los datos que nos ha aportado Lucia Carretero Orientadora del Equipo de Atención Temprana Murcia-2, el DSM-V (manual donde aparece el catálogo de trastornos y su clasificación) no establece una edad mínima para el diagnóstico de TEA, por lo que este se puede realizar cuando se considere oportuno. Los criterios para saber si un niño (de 3-6 años) manifiesta este trastorno, se encuadran en el ya nombrado DSM-V. Es importante concretar si el pequeño tiene asociada una discapacidad intelectual o algún otro síndrome. Para valorar si el menor posee este diagnostico, se utilizan escalas del desarrollo donde se concreta el riesgo de padecer un trastorno del espectro autista. Siempre hablaremos de rasgos o indicadores, aunque algunos psiquiatras pueden ya prescribir el diagnostico preciso de TEA. Según Lucia, es preferible concretar el diagnóstico para organizar de manera óptima el trabajo posterior que se hará con el menor, pues se delimita mejor el tipo de dificultad, aunque se debe indicar que no es una prescripción cerrada, ya que puede cambiar por la propia evolución del infante.

Por último, nos preguntamos cómo intervenir con los niños diagnosticados con TEA. En la educación formal encontramos a los profesionales de la atención a la diversidad encuadrados bien en Equipos, bien en Departamentos, o en Unidades de Orientación. Contamos con orientadores, maestros especialistas en Pedagogía Terapéutica, maestros especialistas en Audición y Lenguaje y Profesores Técnicos de Servicios a la Comunidad, entre otros.

Por otra parte, las asociaciones también juegan un papel importante. Algunas de estas asociaciones en la Región de Murcia son ASTRADE, ASTEAMUR y ASPERMUR.

Nos hemos puesto en contacto con la Psicóloga General Sanitaria, Estíbaliz Hernández que forma parte del equipo de ASPERMUR, para que nos cuente cómo trabajar con los niños TEA. Estibaliz nos informa que ASPERMUR es una asociación especializada en el síndrome de asperger, donde se evalúan a las personas, se orienta a las familias y se ofrecen recursos a nivel laboral, de ocio y tiempo libre. Además, se ofrecen talleres de habilidades sociales grupales y terapia individualizada. La labor de Estíbaliz consiste en la elaboración de talleres de habilidades sociales donde se ayuda a adolescentes y adultos jóvenes (aunque también se trabaja con niños pequeños) a generar estrategias para el afrontamiento de la vida social mediante talleres encaminados a trabajar los estilos comunicativos a través de rol-playing, la resolución de conflictos y otras actividades afines.

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