Da la impresión de que pertenecía a un tiempo muy lejano por la sencilla razón de que de ella solo conocíamos su voz, pero no importaba. Las palabras que fue poniendo durante años y años a los personajes de los seriales que poblaban la radio anterior a la televisión y después a los actores de la pequeña pantalla la han convertido en una evocación de las tardes soporíferas de verano, en las que el tiempo parecía estancado hasta el atardecer.

La noticia de la muerte de Martilde Conesa, que durante mucho tiempo fue una de las estrellas del cuadro de actores de Radio Madrid, no me ha sorprendido tanto porque desaparezca la mujer que dobló a la perversa Angela Channing de 'Falcon Crest', sino por la distancia de aquellas historias contadas por la radio en los días laborables. Puede que nadie recuerde las radionovelas, pero voz sigue sorprendiéndonos en los atormentados personajes de Bette Davis como una aparición de otro tiempo.