Estimados señores y señoras:

Les escribo a ustedes porque tengo un problema. El otro día, fui a comprar un regalo para la mujer propia (una artículo de bisutería, que no está la situación para otra cosa), y el empleado de la tienda me enseñó unos broches. Yo me puse a dudar porque mi mujer no es mucho de colgarse chatarra, hasta que el chico me dijo señalando uno de los objetos: "Este se lo he visto yo en la tele a Carmen Lomana". El tono de su voz era tan natural, tan definitivo, que no me atreví a decirle que yo no tenía la menor idea de quien era esa señora, así que sonreí como un memo y compré el broche. Cuando llegué a casa y entregué el regalo, con gran convicción repetí la frase del vendedor, y mi mujer, que es menos discreta que yo, me dijo directamente: "Y quién es esa?", y la verdad, no supe contestarle.

Esta situación me ha llevado a una meditación bastante profunda porque varias veces me ha ocurrido algo similar. La gente habla delante de mí de personas que salen en la tele de las que no tengo la menor idea. Vamos, que, en lo que se refiere a esa gente, soy materialmente analfabeto. Es verdad que nunca he visto ni siquiera uno de los programas esos llamados 'del corazón', ni pongo la tele por la mañana, que creo que hay varios, ni 'grandes hermanos', ni 'hay una cosa que te quiero decir', etc. Jamás, oigan ustedes, jamás, he visto uno y tengo unas lagunas culturales en este tema que son realmente tremendas.

Y el caso es que yo consumo varias horas de televisión al día, sobre todo, por la noche. De la 1 he huido con armas y bagajes porque mis dos cosas favoritas de esta cadena, los informativos y Españoles por el mundo han sufrido cambios que no me van: los telediarios están tan burdamente manejados (a lo mejor si lo hicieran más inteligentemente me habría quedado) que te da la sensación de que te tratan como un idiota, y el EspañolesÉ lo han pasado a las 11.30 de la noche y ese horario ya no me cuadra porque siempre he comenzado a ver otra cosa. De la 2, sigo viendo Días de cine, La mitad invisible y algún documental o película. La 3 y la 4 no las veo nunca. De la 5, Pasapalabra alguna vez, y el telediario, que es el que utilizo para informarme ahora. De la 6, El intermedio, y poco más. El resto de mis horas diarias de televisión lo dedico a películas, documentales y cosas de música que consigo por aquí y por allá.

Y, claro está, mi situación con respecto a montones de temas y de personas que salen en la tele es de absoluto desconocimiento, y por eso les escribo a ustedes los que saben. ¿Alguno me podría pasar unos apuntes o darme una charla sobre quién es Carmen Lomana? Y el que dice esta mujer, dice Mercedes Milá, que creo que un día se subió la falda y enseñó el culo, o una teta, o qué se yo. También está el tema Belén Esteban, del que no sé materialmente nada. En fin, que necesito ponerme al día, porque en este país, tan cubierto por la basura de la corrupción, los Bárcenas, las preferentes, los eres, etc. no se puede despreciar ningún tipo de basura. Todas pertenecen a nuestro acervo cultural y ya son como muy nuestras.