La mujer asesinada en Las Torres temía por su vida, según revela su hermana

La hermana de la mujer asesinada en la vivienda familiar de Las Torres de Cotillas (Murcia) ha revelado al declarar como testigo en el juicio que se desarrolla en la Audiencia Provincial de Murcia que aquella le dijo que estaba atemorizada y que pensaba que su hijo, el acusado de matar a golpes a ella y a un hermano, podría acabar con su vida.

La testigo, que ejerce la acusación particular en la vista oral que comenzó el pasado lunes ante un jurado popular, ha explicado que su hermana le comentó que en muchas ocasiones cuando el procesado, Iván G.P., volvía de alguna fiesta era incontrolable, por tenía mucho miedo.

Y ha añadido que su hermana no lo denunció por miedo a su reacción, aunque sí trataron de solucionar el problema acudiendo a la unidad de Psiquiatría de un hospital de Murcia y a la consulta de un psicólogo.

Arranca el juicio del doble crimen de Las Torres de Cotillas: "Un santo no soy, pero no maté a mi madre ni a mi hermano"

Esta nueva sesión de la vista oral ha dado comienzo con el testimonio de una vecina cuya vivienda está enfrente de aquella en la que se produjo el doble crimen y que ha manifestado que Iván G.P. acudió a su domicilio gritando "Socorro, ayuda, mis padres, mis padres", pero cuando iba a abrir la puerta ya se había marchado.

A continuación ha declarado la dueña de un establecimiento de la zona, quien ha manifestado que el acusado llegó a los gritos de "Policía, policía…mis padres", pero que al salir a la calle para preguntarle qué es lo que pasaba ya no estaba, aunque sí pudo apreciar que había dejado unas manchas de sangre en el local.

Otro testigo, que se encuentra enfrentado al acusado por motivos personales, ha declarado que aquella noche vio que aquel iba con su coche derrapando por las calles de la localidad y que en un momento colisionó su coche contra el suyo, por lo que pensó denunciarlo, de lo que desistió al pedirle el padre que no lo hiciera porque hablaría con él.

Una prima del acusado, a la que el padre de éste pidió tras el crimen que pasara por la vivienda a coger unos enseres, ha señalado que en la vivienda no se encontraba el bolso ni la documentación de la fallecida, ni, tampoco, el dinero que le había indicado que estaba debajo de la mesita de noche.

También ha pasado por la Audiencia un amigo del procesado, con el que estuvo de excursión en Granada para ver la nieve una semana antes de los hechos, quien ha indicado que Iván le llamó aquella misma noche para pedirle los 20 euros que le había prestado durante el viaje y que se vieron para devolvérselos.

Finalmente, otro testigo, amigo del acusado y con el que también estuvo la noche del crimen, ha declarado a la Sala que en una ocasión este le dijo que había visto una furgoneta que rondaba su casa y que no paraba de dar vueltas por las inmediaciones.

La vista oral continuará este martes con la declaración de los guardias civiles y los policías locales que intervinieron en las actuaciones llevadas a cabo tras el suceso.

En sus conclusiones provisionales, la fiscalía reclama para Iván G.P. 25 años de prisión por cada uno de los dos asesinatos, cometidos en marzo de 2018 utilizándose como armas homicidas unas mancuernas y unas reactancias