El antiguo hospital Los Arcos de San Javier, ubicado en el paseo marítimo de Santiago de la Ribera, que permanece cerrado desde hace ocho meses, cuando se trasladaron sus instalaciones a la nueva ubicación en Pozo Aledo, ha encontrado un nuevo uso al acoger a la Escuela de Piragüismo de la localidad, a petición del ayuntamiento a la Comunidad Autónoma. La dirección general de Patrimonio, propietaria del edificio, ha autorizado la instalación temporal de la Escuela de Piragüismo hasta que se encuentre una nueva ubicación. Tras la demolición del balneario del restaurante Miramar en la playa de Barnuevo, que fue la primera sede de la Escuela, y al no salir adelante el proyecto de una nueva junto a la Academia General del Aire, el Ayuntamiento decidió en su momento alquilar el edificio del establecimiento hostelero, que sus antiguos propietarios vendieron a un empresario de la localidad.

El Miramar ha acogido desde entonces a la Escuela de Piragüismo, pero el edificio, ubicado a escasos metros del mar y que fue legalizado en su día, pese a hallarse en dominio marítimo-terrestre, recobrará de nuevo su uso hostelero tras haberle otorgado el Ayuntamiento la licencia de apertura. En estos momentos se están llevando a cabo las obras de remodelación del edificio, que se ha deteriorado sensiblemente en los últimos años.

A partir de ahora, las piraguas se guardarán en una nave de uralita que se ha instalado en la antigua terraza de la cafetería del hospital, que antes fue un hotel de lujo con piscina, la primera que hubo en la zona en los años 60. La Escuela también utilizará la planta baja del centro hospitalario, que los operarios municipales están poniendo a punto. El resto del edificio permanecerá cerrado. El cierre de Los Arcos ha supuesto un durísimo golpe económico para los comercios ubicados junto al hospital, que en algunos casos han visto cómo su facturación ha caído en un 90%, ya que la zona se queda prácticamente vacía cuando acaba la temporada estival.