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Vox advierte al PP que no aceptará "ningún chantaje" para formar gobiernos

El PP presionará para formar un Ejecutivo en solitario, pero Antelo recuerda que "ahora toca sentarse a negociar" y hay varios ayuntamientos en juego

José Ángel Antelo, el domingo por la noche.  | FRANCISCO PEÑARANDA

José Ángel Antelo, el domingo por la noche. | FRANCISCO PEÑARANDA / Francisco Peñaranda

Jaime Ferrán

Jaime Ferrán

El Partido Popular es el ganador indiscutible de las elecciones del 28 de mayo. Pero el respaldo de más del 42% de los murcianos no le sirve para alcanzar la mayoría absoluta y necesita que Vox se abstenga en la investidura de su candidato, Fernando López Miras.

Creen los populares que al haber sacado más escaños que toda la izquierda junta, la formación de Santiago Abascal se verá obligada a dejarle gobernar y renunciar a sus pretensiones de gobernar en solitario. Sin embargo, ayer, el propio líder del partido envió un claro mensaje al PP. «No vamos a aceptar ningún chantaje», dijo, para referirse a las conversaciones entre equipos para formar gobiernos. «No vamos a regalar la confianza de los españoles. No somos el coche escoba de nadie», afirmó Abascal, que subrayó que «no solo depende de Vox que no haya gobiernos de izquierdas».

Puede que el PP tenga fuerza suficiente para exigir un Gobierno «sin ataduras», pero Vox puede jugar con la baza de los ayuntamientos en donde su voto es decisivo.

Vox ha pasado de 35 a 80 concejales y entra en doce ayuntamientos más respecto a la anterior legislatura (en total son 36 consistorios).

Además, aseguran ser decisivos en 16 municipios de la Región: Abarán, Alhama de Murcia, Cartagena, Cehegín, Cieza, Fuente Álamo, Jumilla, Lorca, Molina de Segura, Puerto Lumbreras, San Pedro del Pinatar, Torre Pacheco, Las Torres de Cotillas, Totana, La Unión y Yecla.

«Ahora toca sentarse a negociar, derrotar una a una las políticas de la izquierda y hacer realidad la alternativa», dijo ayer el presidente provincial de Vox, José Ángel Antelo, en sus redes sociales. En este sentido, Vox puede aceptar quedarse en la oposición, pero podría intentar que el futuro Gobierno murciano acepte algunas de las medidas que ya se han puesto en marcha en Castilla y León, donde el Ejecutivo está formado por PP y Vox y es su modelo de Ejecutivo ideal, según reconoció a La Opinión en su entrevista electoral. «Allí se ha reducido el dinero destinado a los sindicatos en un 50% y están apostando por la vida, por la familia», remarcó.