Las nuevas tecnologías entran en el ámbito educativo infantil para atraer la atención de los niños y acelerar su nivel de aprendizaje, a través de contenidos altamente visuales y auditivos. Las pizarras interactivas e inteligentes, los pupitres informáticos, las bibliotecas digitales, las plataformas de libros electrónicos y las wikis son algunos de los elementos que dan forma al aula tecnológica. Las escuelas y centros educativos infantiles han incorporado con éxito algunos de estos recursos tecnológicos en su modalidad de enseñanza y aprendizaje para motivar a los niños en sus actividades diarias, mejorar sus resultados académicos y prepararlos para su vida futura en la sociedad del conocimiento y la información.

Una de las nuevas herramientas tecnológicas más revolucionarias en el entorno educativo infantil ha sido la pizarra interactiva de pantalla táctil, la cual constituye un instrumento de enseñanza que no sólo promueve la participación, sino también atrae y mantiene la atención del grupo de escolares y reduce los problemas de comportamiento.

Los pupitres informáticos son un centro de aprendizaje que consiste en un PC empotrado en un mueble con el que los niños pueden aprender matemáticas, ciencias o crear cuentos animados en función de su edad.

También existen portales y servicios online que funcionan como verdaderas bibliotecas digitales, repletas de libros electrónicos de distintos autores y material didáctico digital de código abierto creado y modificado por profesores y educadores, según las necesidades del curso escolar.

Si bien las nuevas tecnologías se presentan como toda una revolución para la educación infantil, lo cierto es que es esencial considerar que el proceso de aprendizaje no es igual en todos los escolares; en la mayoría de los casos, éste debería ser personalizado.

Por esta razón, mientras algunos prefieren métodos de enseñanza participativos y visuales, otros optan por las técnicas convencionales de transmisión de contenidos de forma oral y textual. Sin embargo, los educadores deben seguir tras la búsqueda de entornos en los que los estudiantes aprendan. La idea es que el escolar esté en el entorno apropiado y aprenda interactuando con los objetos encontrados en él. j. B.