Tenis

Carlos Alcaraz elude presión en Wimbledon

"Hay muchos nervios y hay que intentar calmarlos", explicó el tenista murciano que cambió su rutina habitual ante la semifinal londinense

Carlos Alcaraz en las instalaciones del All England Tennis Club de Londres. | ANTOINE COUVERCELLE

Carlos Alcaraz en las instalaciones del All England Tennis Club de Londres. | ANTOINE COUVERCELLE / jaume Pujol-galceran. londres

Jaume Pujol-Galceran

Tensión y nervios. Llega la hora de la verdad en Wimbledon. Todo o nada sobre el tapete verde de la central del All England Tennis Club de Londres. Los primeros en lanzar la bola en juego serán Novak Djokovic y Jannick Sinner (14.30 horas, Movistar) y en el segundo turno lo harán Carlos Alcaraz y Daniil Medvedev.

«Hay muchos nervios y hay que intentar calmarlos», admitía Alcaraz que ayer optó por variar la rutina de los últimos días y decidió no entrenar en la pista, hacer recuperación física y relajarse con la familia y su equipo en su casa. Una práctica que hizo habitual en Roland Garros los días antes de los partidos a excepción de la semifinal que perdió con Djokovic, cuando le aparecieron los calambres por la tensión del momento.

«La experiencia de lo que hice mal en Roland Garros me servirá para hacerlo mejor ahora», valoraba el tenista murciano tras vencer a Holger Rune. Alcaraz no quiere que los nervios vuelvan a traicionarle y paralicen su cuerpo como le pasó en París. Físicamente se encuentra al 100% y tenísticamente muy confiado. «Siento que soy capaz de ganar el torneo. Tengo el nivel para conseguirlo y lo estoy demostrando, aunque Djokovic es el gran favorito», decía pero admitía también que ante Rune comenzó «muy nervioso, me costó controlar las emociones». Así que decidió con su equipo variar la preparación del partido contra Medvedev.

Alcaraz quiere disfrutar de su tercera semifinal de Grand Slam aunque estar a un paso de la final de Wimbledon es una presión extra que el mismo se puso y le persigue desde que llegó a Londres. El partido contra Medvedev va a ser la penúltima pantalla que superar y no quiere que los nervios le atenacen aunque jugar en el segundo turno tampoco le ayudará a darle tranquilidad, sin saber la hora exacta que jugará y la rutina a seguir para preparar el partido.

Rival atípico y peligroso

Tampoco ayuda tener a Medvedev de rival. El ruso es un tenista atípico y muy peligroso. Capaz de lo mejor o lo peor como bien sabe Alcaraz de sus dos anteriores enfrentamientos. El año pasado, en Wimbledon, perdió por 6-4, 6-1 y 6-2 pero este año, en Indian Wells, Alcaraz le dominó 6-3 y 6-2.

«Aquello no contará aquí. No será lo mismo. En Wimbledon la bola bota mucho más baja y el saque es mucho más importante», destacaba Medvedev, que se presenta al partido con mejores estadísticas con su saque con 57 aces y 84% de puntos ganados con el primer servicio por 35 y 79% para el tenista murciano. Las estadísticas están igualadas pero Medvedev no se engaña con Alcaraz. «Tiene un disparo que puede ser brutal, eso es con lo que tendré que lidiar», destacaba.

Medvedev afronta el partido cargado de confianza. Estuvo a un paso de marcharse de Wimbledon en cuartos ante el sorprendente Christopher Eubanks. «Perdí el control, el enfoque y el impulso del partido, pero lo superé y me siento genial», decía el ruso que se siente feliz de volver a jugar después de la prohibición de hacerlo el año anterior por la invasión de Rusia en Ucrania.

Presión extra

La ansiedad del momento también la siente Medvedev, que aspira al máximo. «Esta vez me puse más presión antes del torneo, necesitaba hacerlo bien aquí y lo estoy haciendo. Así que me pondré un extra de presión para los próximos dos partidos», decía.

De esa presión tampoco se escapa Novak Djokovic, a pesar de su experiencia con 7 títulos y 91 victorias en el torneo londinense. La lucha del tenista de Belgrado está contra sus rivales y consigo mismo por los récords que persigue en Wimbledon, donde no pierde desde 2017 y está a dos partidos de igualar los ocho títulos de Roger Federer y sumar su 24 Grand Slam.

Todo un reto que quiere mantener en su semifinal ante Jannik Sinner, posiblemente de los cuatro aspirantes al título, quien tenga menos tensión por ser el último favorito en las apuestas al título, aunque también ansioso por romper los pronósticos.