Cine

Polémica por la película sobre el cartaghinés Aníbal, protagonizada por Denzel Washington

El debate ha llegado incluso al Parlamento

Paula M. Gonzálvez

Paula M. Gonzálvez

Si el mismísimo Ridley Scott, que maravilló al público con Gladiator, ha tenido que hacer frente a la polémica que ha suscitado Napoleón, la película sobre el general carthaginés Aníbal no se ha quedado atrás, y ha levantado ampollas antes incluso de su rodaje. Las razones por las que ya se está cuestionando la cinta de Netflix que estará protagonizada por Denzel Washington son similares.

Túnez, la 'patria' del general, ya está cuestionando la descripción que se hace del personaje en la cinta, y no en lugares menores: el asunto ha llegado al Parlamento, donde se ha criticado que se muestre al conocido como 'padre de la estrategia' -un sobrenombre acuñado por los historiadores- como "un africano negro", según recoge Variety. El asunto también ha llegado a la prensa francesa, en la que Napoleón ha sido protagonista por razones obvias, que se ha hecho eco de la noticia en sus cabeceras.

"Falsificar la historia"

"Existe el riesgo de falsificar la historia: debemos tomar posición sobre este tema", ha manifestado el parlamentario Yassine Mami, que indica que el líder era de origen semita, específicamente de Asia occidental.

También ha tenido palabras para la producción la ministra de Cultura, Hayet Ketat-Guermazl, aunque en su caso para defender la obra. Para ello ha subrayado que se trata de una ficción y que Netflix tiene "derecho a hacer lo que quiera": "Aníbal es una figura histórica y todos estamos orgullosos de que fuera tunecino. ¿Pero que podemos hacer?". Sus palabras conciliadoras podrían responder a las negociaciones que están llevando a cabo para que la plataforma lleve, al menos, parte del rodaje, a Túnez, como ha revelado.

Ilustración de Aníbal Barca y su ejército cruzando Los Alpes.

Ilustración de Aníbal Barca y su ejército cruzando Los Alpes. / Arrecaballo

Por su parte, los medios tunecinos también están abordando el tema dado que se ha convertido en motivo de debate nacional. El diario La Presse ha publicado un editorial en el que tacha de error histórico que se represente a Aníbal como una persona negra.

Denzel Washington será también productor de la película (que aún no tiene título), dirigida por Antoine Fuqua. Ambos ya han trabajado juntos en títulos como The Equalizer o Training Day  y este supone un sueño cumplido para el actor, que lleva años persiguiendo llevar el personaje de Aníbal Barca al cine.

El metraje abarcará la época de la Segunda Guerra Púnica, cuanto el comandante carthaginés lideró los ejércitos en las batallas contra la República Romana. Las tropas salieron de Hispania para llegar a la capital del Imperio romano, para lo que tuvieron que atravesar los Pirineos y los Alpes con hasta 38 elefantes de guerra. El guion estará escrito por John Logan, que ha trabajado con cineastas como Scott y Scorsese en Gladiator o El aviador, y estará producida por Hill District Media, con Erik Olsen y Adam Goldworm.

El debate de la fidelidad histórica en el cine es cada vez más recurrente, y la pregunta siempre es la misma: ¿Pueden las producciones tomarse estas licencias tan llamativas o, una vez que se vende como un biopic deben ajustarse a los hechos tanto como les sea posible?