Salud

Una técnica radioterápica en la Arrixaca para tratar el cáncer de mama y proteger el corazón

Los profesionales de Radioterapia Oncológica de la Arrixaca incorporan nuevos métodos para conseguir tratamientos más precisos y con menores efectos adversos para las pacientes con un tumor en el seno izquierdo o para aquellos usuarios con lesiones pulmonares y hepáticas

Una representación de los profesionales que forman parte del Servicio de Oncología Radioterápica de la Arrixaca.

Una representación de los profesionales que forman parte del Servicio de Oncología Radioterápica de la Arrixaca. / L.O.

Adrián González

Adrián González

Una nueva técnica para las pacientes de cáncer de mama a fin de conseguir un tratamiento más preciso y con menores efectos adversos, sobre todo en los pulmones y el corazón. El servicio de Oncología Radioterápica del Hospital Virgen de la Arrixaca de Murcia ha comenzado a implementar recientemente de forma innovadora la ‘inspiración profunda mantenida’ para tratar a pacientes con cáncer en la mama izquierda.

Esta nueva técnica mejora considerablemente el tratamiento del cáncer de mama con radiaciones ionizantes y su gran beneficio es que irradia la zona sin afectar al corazón. La técnica de inspiración mantenida profunda implica que el paciente inhale profundamente y mantenga su respiración mientras se administra la radiación. 

Esto permite que al inspirar profundamente, los pulmones se llenen de aire y el corazón se aleje de la mama izquierda, que es la zona donde se produce el tratamiento, minimizando así la irradiación de los tejidos sanos cercanos.

«La paciente recibe la radiación mientras realizan una apnea de 20 segundos, aumentando la distancia que hay entre la pared torácica y los órganos internos. Esto ayuda a disminuir las dosis de radiación que pueden llegar al pulmón y corazón durante la irradiación de la mama», explican los profesionales del servicio.  

Otras de las ventajas de esta nueva técnica es que la respiración se monitoriza a través de la máquina, que se sincroniza con la respiración, por lo que solo se administra el tratamiento cuando detecta que la persona se encuentra en esta inspiración mantenida. Así, cuando suelta el aire la radiación se detiene hasta que se vuelve a la posición de inspiración. No obstante, recuerdan los responsables, si el usuario no puede mantener la respiración por algún motivo, no es un problema, ya que se pueden utilizar otros métodos para garantizar que se reciba el mejor tratamiento. 

El sistema ABC, otra novedad

No es el único nuevo procedimiento que se viene realizando en el complejo hospitalario de referencia en el Área I de Salud. La otra técnica incorporada hace unos meses entre los sanitarios del servicio es el tratamiento de lesiones pulmonares y hepáticas con el sistema ABC (Active Breathing Coordinator). 

Por este servicio del hospital de El Palmar pasan unos 2.000 pacientes cada año

En concreto, esta permite tratar las lesiones en distintas fases del ciclo respiratorio y así reducir el movimiento del pulmón y por ende el tamaño de la lesión a tratar. El objetivo principal es reducir el tejido sano que recibe radiación y así minimizar los efectos adversos, explican los profesionales.

Por el Servicio de Oncología Radioterápica de la Arrixaca pasan aproximadamente unos 2.000 pacientes al año, no solo de la zona de Murcia, sino también derivados de diferentes áreas de salud del Servicio Murciano (SMS). Esta cifra tan alta se debe a que se estima que entre el 60 y 70% de los pacientes oncológicos necesitan tratamiento con radioterapia en algún momento de su enfermedad.

Uno de los principales ‘hándicaps’ que tiene este Servicio es el posible «miedo» y el «desconocimiento» que pueden tener los pacientes que por primera vez son derivados y sometidos a las distintas pruebas que realizan sus profesionales, quienes defienden que la radioterapia es uno de los «tres pilares básicos de los tratamientos contra el cáncer».

Se puede administrar de forma radical con intención curativa, antes o después del tratamiento quirúrgico, o junto con la quimioterapia. Además, también tiene un papel importante en el control de síntomas paliativos como pueden ser el dolor y/o el sangrado.

Dentro de los tumores que se tratan con radioterapia actualmente se encuentran los mamarios, genitourinarios, ginecológicos, pulmonares, o tumores del área de cabeza y cuello, cerebrales, sarcomas, tumores del aparato digestivo, tumores cutáneos y tumores en pacientes pediátricos.

Entre el 60 y el 70% de los enfermos oncológicos necesitan pasar por radioterapia en algún momento

Involucrados con el proyecto

En la Arrixaca el equipo está formado por más de setenta profesionales: trece facultativos especialistas en Oncología Radioterapia (dirigido por un jefe de Servicio y dos jefes de Sección), cuatro MIR, seis facultativos especialistas en Radiofísica hospitalaria y tres físicos internos residentes, diez enfermeras, veinte técnicos de radioterapia, seis auxiliares de enfermería, tres técnicos administrativos y tres celadores. 

Antes de someterse a las distintas pruebas del Servicio, habitualmente se hace una primera valoración en consulta para ver la situación del paciente, la necesidad de tratamiento y qué técnica es la más indicada. «Los pacientes son comentados previamente en comités de tumores interdisciplinares para individualizar cada manejo», sostienen.

Durante el tratamiento se realiza un seguimiento clínico para vigilar la tolerancia a la radioterapia y si requieren alguna medida de soporte. Posteriormente se realiza una evaluación de respuesta al tratamiento con analítica o pruebas de imagen que tomaremos de referencia para posterior seguimiento.