La práctica de las quemas agrícolas en la Región de Murcia ha acumulado en los últimos años un importante número de normativas que las regulan, sin que ninguna llegase a estar mucho tiempo en vigor. Desde la prohibición total hasta un decreto tumbado en los tribunales, el control sobre la incineración de restos agrícolas ha resultado ser un quebradero de cabeza en un contexto donde ha cogido mucha relevancia la protección de la calidad del aire y de la salud humana

Desde principios de este año las quemas de los desechos de podas se pueden llevar a cabo en las explotaciones agrarias más pequeñas en toda España. La Ley de la PAC, que se aprobó a finales de 2022 y que regula el reparto de estos fondos, también abre la puerta a esta medida cuando antes estaba prohibido. Sin embargo, esta norma chocaba con el reglamento que controlaba las quemas en la Región de Murcia, y que también tiene muy poco tiempo de vida. 

La Región es la única comunidad que obliga a que exista un problema fitosanitario para poder quemar rastrojos

Ahora, la Consejería de Agricultura, a fin de adaptarse a las nuevas reglas nacionales, aprobará un nuevo decreto-ley que derogará el anterior y que permitirá que tanto pequeñas como microexplotaciones agrarias puedan eliminar los residuos vegetales sin necesidad de autorización. Únicamente, los titulares de estas fincas deberán realizar una comunicación previa a la Comunidad, mientras que quienes tengan unos terrenos más grandes deberán continuar solicitando una autorización para la quema. 

Agricultura regresa así al viejo modelo implantado hasta mitad del pasado año, cuando el Tribunal Superior de Justicia de Murcia anuló este tipo de control por no tener en cuenta el medio ambiente y la salud humana. En este caso, fuentes de la Consejería señalan que la nueva regulación cuenta con el visto bueno de los servicios jurídicos y aseguran que no habrá problemas. 

Otra de las novedades está en que la Región de Murcia será la única comunidad de España que mantenga la condición de poder quemar rastrojos si hay un riesgo de aparición o expansión de plagas, es decir, un problema fitosanitario. Para comprobar que existe este inconveniente, Agricultura establecerá un porcentaje de inspecciones entre todas las comunicaciones que lleguen para comprobar ‘in situ’ que la quema se realiza bajo los criterios establecidos en el nuevo decreto. Otros territorios han optado por dejar vía libre a las quemas sin control. 

Por hectáreas

Por otro lado, la definición de qué es una micro o pequeña explotación ha sido una tarea compleja para la Consejería, ya que los técnicos jurídicos descartaron que se pueda emplear la fórmula que han seguido otras comunidades, que utilizaban como referencia los criterios de las pymes (número de trabajadores o facturación). De ser así, el 99% de las fincas agrícolas de la Comunidad estarían exenta de pedir una autorización

Los ayuntamientos podrán regular la distancia de los fuegos con las áreas urbanas para evitar la contaminación

Ahora, las microexplotaciones serán aquellas que midan menos de 0,5 hectáreas, mientras que entre las pequeñas habrá dos distinciones: en regadío la superficie será de 10 hectáreas y en secano de 30 hectáreas. Estos criterios han sido establecidos, para estos casos, por el Instituto Murciano de Investigación y Desarrollo Agrario y Medioambiental (Imida). Para las fincas grandes, la Consejería cambiará la declaración responsable por la presentación de una solicitud oficial. 

Con la nueva regulación se pretende, además, agilizar el sistema de comunicaciones para no generar un cuello de botella. Ya que, además, los agricultores deberán presentar un justificante ante su ayuntamiento para que estén avisados. 

Ordenanzas municipales

La Consejería dará margen a los ayuntamientos para elaborar ordenanzas municipales que regulen la distancia de las quemas con las zonas urbanas. El objetivo es evitar la contaminación en las áreas residenciales pero, sobre todo, alejar estas prácticas de centros escolares o sanitarios. 

La nueva regulación también recogerá otras condiciones para realizar esta práctica, alguna de las cuales cambiará con respecto al actual sistema, pero se mantiene el horario de quemas (desde la salida del sol hasta la 13.30 horas) o mantener una distancia de 400 metros de un monte.

UPA ve necesario el nuevo decreto de quemas

El nuevo reglamento que prepara la Consejería de Agricultura sobre las quemas agrícolas, y que se prevé aprobarlo en Consejo de Gobierno en poco tiempo, es una «necesidad para los agricultores»; según UPA Murcia. La organización agraria cree necesario este cambio en la normativa regional tras la aprobación de la Ley de la PAC, que permite desde principios de año las quemas agrícolas. UPA ya envió una propuesta a la Consejería para adaptar el reglamento murciano y conseguir así agilizar el trabajo de los agricultores titulares de pequeños terrenos que no tienen la facilidad para aplicar alternativas en la gestión de estos residuos. 

UPA pide a los ayuntamientos que preparen ordenanzas municipales que aseguren la protección de la calidad del aire en las zonas urbanas, ya que permitirá alejar de ellas la incineración de estos restos vegetales. Algunos consistorios ya tienen aprobadas estas medidas y mantienen un margen de entre 200 o 500 metros por seguridad. «Deben establecer los mecanismos para que los agricultores no tengan dudas a la hora de incinerar».