Educación

Cientos de estudiantes y profesores de la UMU alzan la voz contra el “recorte” de plazas

Los sindicatos denuncian un “ERE encubierto” para los docentes asociados y varias facultades rechazan la propuesta del Rectorado

Protesta de los estudiantes y profesores frente a Convalecencia, este viernes.

Protesta de los estudiantes y profesores frente a Convalecencia, este viernes. / Javier Martínez

Alberto Sánchez

Alberto Sánchez

Las protestas vuelven a la Universidad de Murcia. Cientos de estudiantes y profesores de la institución han protestado en la mañana de este viernes en el campus de La Merced contra la propuesta de plazas en las titulaciones del próximo curso. Alumnos y docentes llegados, sobre todo, de las facultades de Letras, Educación y Derecho, los títulos afectados por la redacción de puestos que se plantea, han copado gran parte de la convocatoria. Los estudiantes se han movilizado al edificio de Convalecencia, donde el Consejo de la UMU finalmente a favor de dicha oferta de plazas para los años 23/24.

La propuesta del rectorado ha encontrado el rechazo frontal de las tres facultades más afectadas, cuyas juntas de centro se han posicionado en contra y han lanzado sendos comunicado pidiendo la retirada de la oferta. Ahora mismo, dicha propuesta implicaría reducir plazas hasta en ocho titulaciones y aumentar plazas en otras 19 titulaciones. Finalmente, Derecho no perderá plazas. El Consejo de Estudiantes de la UMU, Comité de Empresa del PDI laboral y la Junta de Personal Docente han rechazado también los planes del rectorado y han votado en contra en el Consejo. Los grados que perderían puestos serían ADE, Biología, Relaciones Labores y Recursos Humanos, Física, Historia del Arte, Lengua y Literatura Española, Pedagogía y Educación Primaria.

Alumnos frente a Convalecencia, donde se celebra el Consejo de Gobierno

Alumnos frente a Convalecencia, donde se celebra el Consejo de Gobierno / L.O.

El rectorado defiende que la oferta planteada es un reajuste de plazas necesario para atender “la demanda real” de los grados que verán reducidos sus puestos. Los sindicatos entienden que esta oferta implicará un “ERE encubierto” del profesorado asociado para el próximo curso, como señalaba Piedad Fernández, de Comisiones Obreras. El sindicato estima que, por ejemplo, en la Facultad de Educación no se volverían a contar con hasta 10 profesores asociados a partir de septiembre. "No ha existido negociación", protestaba.

Ana Aldaz, portavoz de la plataforma de profesores asociados, ha subrayado además que la propuesta implicará la pérdida de varios grupos de docencia y prácticas en el primer curso, pero que esta eliminación también conllevaría perder grupo en el resto de cursos como en Derecho o grados educativos como Pedagogía y Primaria. No olvidan los sindicatos que este problema nace de la “infrafinanciacion” que sufre la Universidad de Murcia por parte de la Comunidad Autónoma.

"En el trasfondo de esta oferta lo que se pretende es reducir costes porque no existe financiación suficiente del Gobierno regional", reflejaba Aldaz. Los contratos temporales de los asociados están vinculado a cubrir las labores de prácticas, asignaturas concretas o la dirección de trabajos de fin de grado o máster, "una figura de la que se ha hecho abuso en la UMU", cuya plantilla tiene un 45% de docentes en esta situación. "Hemos desarrollado las mismas funciones que nuestros compañeros a tiempo completo pero con un salario muy inferior".

Estudiantes y docentes aseguran que para calcular la oferta no se ha contado con los estudiantes de segundas y posteriores matrículas, más los estudiantes de movilidad internacional. Esto llevaría a un aumento de las ratios de alumnos por clase que "incrementaría la carga de trabajo del profesorado". Aldaz no descarta más movilizaciones de los sindicatos para "hacer frente" a estas medidas.

Los asociados recriminan que el ajuste impacta en los títulos con salidas profesionales vinculadas al sector público y, por contra, el aumento “reforzaría los grados que tienen más posibilidades laborales en el sector empresarial. Estamos exportando un modelo privado de la educación”, se quejaba Antonio Maurandi, profesor contratado doctor de la Facultad de Educación, que estima que la ratio de estudiantes en docencia podría llegar el curso próximo a 110 estudiantes por grupo. Los representantes del PDI y centros como Letras subrayaban ayer que esto implicaría “la pérdida de la calidad de la enseñanza”.

Samuel Martínez, subdelegado de la Facultad de Letras y Vicepresidente de Comunicación y Cultura del CEUM, recordaba en la protesta que la oferta "incumple las normas del Espacio Europeo de Educación Superior. La iniciativa va a redundar en una grave organización de los grupos del próximo curso". El estudiantado también ha pedido al Gobierno regional que incremente la financiación de la Universidad para deshacer estos cambios "que afectan de manera esencial a nuestra educación".