El AVE cumple una vieja aspiración, pero solo a medias

La mayoría de los invitados que este lunes se congregaron en la estación de Chamartín para subirse al primer tren de Alta Velocidad que hacía el viaje entre Madrid y Murcia han visto un AVE con anterioridad e incluso es posible que hayan viajado en uno de ellos, pero todos parecían sorprendidos al bajar al andén 19, en el que aguardaba el tren que realizó el viaje inaugural.

Todo el mundo coincidía en que el estreno de la línea de Alta Velocidad constituye un gran avance para la Región y cumple una aspiración que ha necesitado más de veinte años para materializarse, pero solo a medias. El itinerario que sigue la línea de Alta Velocidad por Alicante, Albacete y Cuenca empañaba la euforia del primer viaje, al que se sumaron el rey Felipe VI, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, y el jefe del Ejecutivo regional, Fernando López Miras.

Sin embargo, hasta los políticos más descontentos con el tiempo de viaje o con las paradas en la provincia de Alicante se fotografiaron junto al tren, conscientes de que el acontecimiento supone un hito histórico para la Región, cuyo ferrocarril no ha tenido un cambio tan importante desde que Isabel II inauguró la línea de Cartagena a Murcia en 1862.

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La llegada del AVE ha supuesto la puesta en marcha del primer tramo de tendido electrificado de la Región, aunque solo tiene algo más de 15 kilómetros, y la posibilidad de viajar en un tren capaz de alcanzar los 300 kilómetros.

Sin embargo, la realidad es que los trenes que entran en Alicante aflojan lo velocidad al pasar de Monforte y van prácticamente al paso de los viejos Cercanías de gasoil, además de parar casi un cuarto de hora en la estación alicantina.

Las imágenes de la inauguración del AVE en Murcia

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El senador del PP Francisco Bernabé fue uno de los primeros que quisieron inmortalizar el momento fotografiándose al bajar al andén junto a sus compañeros de la Cámara Alta Violante Tomás y Juan María Vázquez y el diputado del Congreso Juan Luis Pedreño.

Sin embargo, el consejero de Fomento, José Ramón Díez de Revenga, esperó a llegar a Murcia para retratarse junto al tren.

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Los primeros que a los que pudo verse en la estación de Chamartín fueron los presidentes de Fecoam y de Apoexpa, Santiago Martínez y Joaquín Gómez, respectivamente. Ambos coincidieron en que la inauguración era «un momento histórico», que «no volverá a repetirse», según apuntó Santiago Martínez, aunque no dejaban de hacer cálculos sobre la duración del viaje.

También hizo cuentas Francisco Bernabé, quien destacó al llegar a Murcia que el trayecto ha durado «exactamente dos horas y 35 minutos desde Chamartín, lo que podría reducirse a las dos horas y 20 minutos desde Atocha que siempre nos dijeron».

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Al primer viaje hasta Murcia se unió el exsecretario de Estado de Infraestructuras y actual presidente de Paradores, Pedro Saura, quien dijo que «era un día muy importante, porque se ha conseguido el transporte más moderno y con mayor seguridad y, además, llega soterrado».

También acudieron algunos de los portavoces de la Asamblea Regional, Domingo Segado (PP), Francisco Lucas (PSOE) y Francisco Álvarez (de los expulsados de Cs). El portavoz socialista iba acompañado de la diputada por Murcia Marisol Sánchez Jódar.

El tren salió puntualmente de Chamartín a las 13.40 horas, después de que se incorporaran el rey, el presidente del Gobierno y la ministra, acompañados de López Miras.

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A las 15.07 pasaba por Albacete y a las 15.54 paraba en Elche, donde se incorporaron a la comitiva el presidente de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig, y los alcaldes y concejales de los ayuntamientos de Murcia y de la Vega Baja de Alicante.

Desde Elche hasta Murcia el viaje se hizo muy rápido y en cuestión de unos minutos el tren llegaba al túnel que desemboca en la estación del AVE, donde esperaba el resto de los invitados al acto inaugural. Hasta ahora solo los trenes de prueba habían entrado.