Rubén Vives, portavoz de Ecologistas en Acción en la Región, afirma que la medusa manchada australiana que se ha multiplicado en aguas de la Región llegó a la comunidad en barco. En concreto, en las aguas de lastre de los grandes mercantes. Aunque la phyllorhiza punctata ya fue detectada hace años en el Mar Menor, no había tantas como ahora. 

La Organización Marítima Internacional (OMI) lleva años estudiando cómo ‘desinfectar’ el agua arrastrada por embarcaciones turísticas e industriales para equilibrar su peso en travesía. El lastre “se traga las medusas, muchas especies, que normalmente llegan en larvas o huevos”, detalla Vives. Por tanto, se da la circunstancia de que un mercante que transporta contenedores hasta el Puerto de Cartagena “suelte, enfrente de Cabo de Palos, el lastre, y ahí entran esas especies en cantidades”, apunta el ecologista.

"Nosotros tenemos un acuario que se llama Mar Menor", comenta Vives

A priori, “es peligroso el transporte de especies no deseadas, porque lo que transportas en el agua no lo sabes”, precisa Vives, que recuerda que “ya hay organismos internacionales poniendo medidas, intentando que se suelte el lastre en unas condiciones determinadas”, como quiere la citada OMI. 

En barco llegó el mejillón cebra, considerada una de las especies exóticas invasoras más peligrosas por su impacto económico y su daño sobre los ecosistemas. Además, “hay algas que están llegando en barco”, puntualiza Vives.

Volviendo a la medusa australiana, especie que posee un veneno de baja intensidad, el portavoz de Ecologistas en Acción comenta que “no se sabe cómo se va a desarrollar”, dado que “el medio marino es todavía muy complejo: puede llegar, existir, reproducirse... que pueda proliferar aún no se sabe”. En la misma línea se mostraban este viernes los científicos del Comité de Seguimiento del Mar Menor, al destacar que “hasta que no pasen un par de semanas y hagamos un nuevo muestreo, no podemos saber si van a proliferar mucho”.

Rubén Vives apostilla que “nosotros tenemos un acuario que se llama Mar Menor”, donde “todos los parámetros están amortiguados por ser una laguna” y “las especies encuentran un nicho maravilloso para ocupar”. 

En la página de la Comunidad se detalla que "phyllorhiza punctata pertenece al filo Cnidaria. Esta especie de medusa pertenece a la clase de los escifozoos, consideradas las verdaderas medusas". "Se ha encontrado ejemplares que superaban los 70 centímetros de diámetro. En la península ibérica se han observado ejemplares en la zona del Delta del Ebro. En el Mediterráneo se la considera una especie invasora. En aguas cálidas esta medusa se desarrolla en gran abundancia. Son medusas eurihalinas que soportan bien los cambios de salinidad, pero cuando baja demasiado (por lluvias torrenciales, por ejemplo) tiene un efecto negativo en la especie porque pierden parte de su zooxantelas (algas simbiontes)", concreta la citada web.