Las fuertes tormentas que pasaron a principios de semana por la Región de Murcia en forma de granizo e, incluso, de un tornado, han causado daños por valor de 16 millones de euros y han afectado a más de 10.000 hectáreas de albaricoques, limoneros, melocotoneros, almendros y nectarinas, principalmente, según ha informado esta mañana el consejero de Agua, Agricultura y Medio Ambiente, Antonio Luengo, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno.
Luengo ha advertido de que estos daños no se limitarán solo a la cosecha actual, sino que afectarán también a cosechas futuras, ya que el granizo tuvo efectos negativos sobre los propios árboles, no solo sobre los frutos.
Para paliar en la medida de lo posible esos daños y evitar futuros problemas por plagas y enfermedades, ha recordado que el Gobierno costeará los tratamientos fitosanitarios de recuperación de la madera, tal y como anunció este martes el presidente autonómico, Fernando López Miras.
Luengo ha lamentado este nuevo "revés al campo" al que hay que sumar los daños provocados por las intensas lluvias de los últimos meses y los episodios de fuerte calima, que en su conjunto provocaron pérdidas cifradas en unos 140 millones de euros en lo que va de año.
Plan del Tajo
Además de estos problemas por las inclemencias meteorológicas, ha criticado también, el sector agrícola se enfrenta a la crisis que se derivará del recorte de los trasvases del Tajo al Segura en unos 105 hectómetros cúbicos anuales tal y como se prevé en el nuevo plan hidrológico.
El consejero ha insistido que ese recorte para aumentar los caudales ecológicos del Tajo poniendo como justificación la mejora paisajística y de calidad de sus aguas es "inaceptable, inasumible e injustificable" y se hace anteponiendo una decisión "política y sectaria" a los criterios y soluciones técnicas.
Por ello, ha recordado que en el momento en que el Consejo de Ministros apruebe el nuevo plan de cuenca y si se mantienen los recortes anunciados, el Gobierno regional presentará un recurso contencioso-administrativo contra esa decisión, con el objetivo de intentar frenarla en los tribunales, como ya se ha hecho anteriormente con otros trasvases mermados con respecto a lo establecido en el Memorándum.
Mar Menor
Preguntado por el proyecto de oxigenación del Mar Menor mediante microburbujas, Luengo ha confirmado que la consejería ha recibido este jueves la autorización para iniciar los ensayos, lo que se hará lo antes posible para seguir trabajando en la protección de la laguna.
No obstante, ha insistido en que cualquier iniciativa será insuficiente si el Ministerio para la Transición Ecológica no pone en marcha medidas para frenar los vertidos de agua dulce contaminada a través de la rambla del Albujón y para rebajar el nivel del acuífero cuaternario, cuestiones ambas en las que toda la comunidad científica coincide en que son esenciales para recuperar el ecosistema.
Otros asuntos
En materia medioambiental, el Consejo de Gobierno ha aprobado también este jueves el plan de gestión integral de los espacios protegidos de la Red Natura 2000 del Alto Guadalentín y los planes de gestión de las zonas de protección y conservación del Cabezo de la Jara y Rambla de Nogalte, que recogen medidas de protección específica para esas zonas.
Además se declararán como zonas de especial conservación las sierras del Gigante y de La Tercia, las Lomas del Buitre y Luchena, Cabezo de la Jara y Rambla de Nogalte, Sierra del Medio y Sierra de la Torrecilla.
También se ha acordado la aprobación del plan de gestión de las zonas especiales de conservación del Cabezo de la Jara y el ámbito territorial total de este plan de gestión es de unas 40.000 hectáreas y afecta a cuatro municipios: Lorca (en un 88 por ciento), Puerto Lumbreras, Totana y Aledo.
Luengo ha puesto en valor la amplia participación que ha habido durante toda la tramitación de este plan de protección, que prevé una inversión superior a los 8 millones de euros en los próximos 6 años (unos 221 euros por hectárea de media).
Estos planes de gestión, ha recordado, son los instrumentos adecuados para conseguir "la coherencia, la compatibilidad y la sinergia entre la conservación de los espacios protegidos, la gestión racional de los recursos naturales y el desarrollo sostenible del territorio desde una perspectiva global y con un enfoque integrador".
