Las casas rurales estarán al completo en el puente de diciembre, mientras que los hoteles de la costa prevén alcanzar una ocupación del 80% durante el fin de semana, que será algo inferior a principios de la próxima semana. Muchas familias murcianas aprovecharán los próximos días de fiesta para celebrar encuentros navideños en previsión de que el repunte de la pandemia les impida celebrar las fiestas, según adelantó a La Opinión el presidente honorífico de la asociación que agrupa a los alojamientos rurales de la Región (Ruralmur), José Antonio Lucas.
«De aquí a Navidad no sabemos qué va a pasar. Mucha gente va a aprovechar para comer y reunirse con la familia», apuntaba. El pasado año la ocupación se situó en torno al 90%.
José Antonio Lucas asegura tras realizar una consulta entre los propietarios de las casas rurales asociadas a Ruralmur que la ocupación alcanzará el cien por cien este año, debido en parte al deseo de los clientes de buscar espacios al aire libre y salones amplios en los que puedan reunirse con mayor seguridad las familias y los grupos de amigos.
«Gracias a la pandemia hay gente de Murcia que está conociendo rincones que antes no sabía ni que existían. Están conectando con los espacios naturales y descubriendo parajes como el Cañón de Almadenes o el Estrecho de Bolvonegro», recordaba.
La chimenea es otra de las demandas de las familias que aprovecharán los festivos de la Constitución y de la Inmaculada para reunirse en una casa rural en previsión de que «después haya restricciones» y no puedan verse para celebrar la Navidad.
«La leña va en el precio», indicó, salvo en el caso de que se produzcan otros pedidos posteriores.
Los clientes también demandan barbacoas para poder preparar la comida al aire libre.
José Antonio Lucas estima que el 80% de las reservas corresponde a familias de la Región, mientras que otro 15% procede de Alicante y el 5% restante, de la vecina provincia de Albacete.
Para la Navidad apenas si hay reservas, dado que «casi todo el mundo se queda en su casa», según recordaba.
Sin embargo, en Nochevieja cambia totalmente el perfil de la clientela, que suele estar compuesta mayoritariamente por jóvenes. Ellos buscan las casas rurales para celebrar las fiestas de fin de año sin los requisitos que puedan establecerse en otro tipo de establecimientos de hostelería.
Ocupación hotelera
También la presidenta de la Asociación de Hoteles y Alojamientos Turísticos de la costa (Hostetur), Soledad Díaz, prevé que los murcianos optarán por quedarse en la Región los días del puente para evitar sorpresas de última hora.
Calcula que el 80% de las reservas que han recibido los establecimientos situados en los municipios del litoral que están abiertos para el puente proceden de familias murcianas, aunque buena parte de los clientes que empezarán a llegar a partir del viernes serán madrileños.
«En todos los municipios de la costa hay hoteles abiertos», aseguró Soledad Díaz. Según sus previsiones, la ocupación llegará al 80% este fin de semana, mientras que bajará el lunes y martes próximos.
La presidenta de Hostetur da por hecho que esta tendencia se mantendrá incluso en los meses estivales y que «el turismo nacional va a coger mucha fuerza. El verano va a ser muy parecido al del año pasado», augura.
La campaña del pasado verano se vio limitada por las restricciones impuestas en la mayoría de los países europeos, sobre todo en Reino Unido, de donde procede la mayor parte de los turistas extranjeros, aunque rozó las cifras anteriores a la pandemia gracias a los clientes españoles.
