La irónica mirada de Ramón Masats llega al Archivo General

Entre 1955 y 1965, Ramón Masats recorrió la geografía de España con su cámara. Fue con motivo de un encargo de la Gaceta Ilustrada sobre los «valores patrios»; trabajo que coincide con el fin de la autarquía del régimen de Franco y con la apertura diseñada desde el Ministerio de Educación y Turismo. ‘Visit Spain’ fue el lema de aquella campaña y el título de una muestra que este jueves fue inaugurada en el Archivo General de la Región y que recuerda al respetado fotógrafo de Caldes de Montbui, fallecido el pasado 4 de marzo.

Comisariada por el murciano Chema Conesa, amigo del artista, y compuesta por más de un centenar de imágenes, Visit Spain es el particular retrato que hizo de aquella España castiza y folclórica un autor fundamental, clave en la renovación del reportaje documental durante aquellos años. Particularmente reseñado fue su ensayo sobre los Sanfermines de Pamplona, pero su afán por entender la vertiente más costumbrista de nuestro país por medio de la fotografía fue una constante a lo largo de su carrera; casi una obsesión. De hecho, ahí están sus incursiones en el medio audiovisual para demostrarlo, caso de la serie Conozca usted España, para TVE, y el largometraje Topical Spanish (1970), con guion propio y del humorista Chumy Chúmez.

Así pues, este es un proyecto idóneo para conocer a Masats (o recrearse en su trabajo). Pero que nadie espere una mirada aséptica por su parte. El relato del catalán dibuja un país atrapado en la pobreza material, laminado en lo social y acérrimo en su atadura espiritual. Hay jornaleros, nazarenos, toros, guardia civiles, fútbol... Pero lo suyo no era solo capturar la realidad; lo hacía con una fuerza sobrecogedora y una mirada notablemente irónica que dotó a su obra de una personalidad poco antes vista por estos lares en el campo del reporterismo. Y es que al final, Masats construye una sugerencia más allá de la mera realidad óptica, aunque siempre deja la interpretación final en manos del espectador.

Como ejemplo, merece la pena destacar una pieza titulada Seminario de Madrid (1960), que muestra a un joven estudiante, ataviado con la protocolaria sotana, haciendo una espectacular estirada con la que evitar el gol de un compañero. Sí, estaban jugando al fútbol, porque Dios nunca estuvo reñido con el balompié; y, aún así, se trata de una imagen tan real como impactante, hasta el punto de que tiene el honor de ser la primera fotografía que el MoMA de Nueva York compró a un fotógrafo español.