Cuidar la salud dental es algo clave, también para los perros. En este sentido, uno de los productos más populares para nuestra mascota son, sin duda, los snacks o barritas dentales, los cuales sirven para que se limpien los dientes, aunque ello no impida que haya que cepillarlos al menos una vez al año. No obstante, hay varios puntos que debes conocer antes de darle estas barritas a tu perro. Te los contamos.

El 'snack' solo no basta

Y es que, pese a que el objetivo de estas barritas sea cuidar la higiene bucal, lo cual hacen, mucha gente piensa que con estas ya basta y no hay que lavar los dientes del perro, lo cual es falso, ya que hay que cepillarle los dientes, al menos, una vez al año. En este punto, hay que recordar que es muy frecuente que los perros sufran problemas como caries o la presencia de diferentes bacterias.

Los perros suelen sufrir problemas dentales.

¿Cuáles escoger?

Este tipo de productos para tu perro lo podemos encontrar en multitud de tamaños y sabores. Sin embargo, si tenemos un perro pequeño debemos darle las de pequeño tamaño y evitar estas en los perros grandes, ya que pueden tragárselas sin masticar, atragantarse y causarle problemas intestinales.

Los snacks o barritas escogidas deben de ser flexibles, para que así las puedan romper en trozos más pequeños y así tragarlas mucho más fácilmente. Los más recomendables son los que están compuestos de almidón de patata. Ten en cuenta también que aportan calorías a tu perro.

¿Cuándo dárselos?

Cabe señalar que a los que son aún cachorros no se les puede dar estas barritas. En cuanto al momento del día y la frecuencia, los expertos recomiendan que solo sea una vez por día y después del desayuno, pudiendo dejar un poco de tiempo después del desayuno para ofrecérselo si no tiene mucha hambre. Hay que recordar que no son golosinas.