Más de 30 años de prisión. Es lo que suman las penas que el Ministerio Público solicita para Adrián S. C., el sujeto que el lunes comenzará a ser juzgado en la Audiencia Provincial acusado de asesinar a puñaladas a la que había sido su novia, Rosa, en el año 2017 en su casa de Canteras, en Cartagena.

Se le acusa de un delito de asesinato alevoso y con ensañamiento, un delito de allanamiento de morada con violencia o intimidación y un delito de amenazas condicionales sin consecución del propósito, realizadas por teléfono y en continuidad delictiva.

Por el primero le piden 25 años de prisión; por el segundo, 3 años y 3 meses de prisión; por el tercero, 2 años y 6 meses de prisión. «El acusado indemnizará a los padres en la cantidad de 180.000 euros y a la hermana menor en la cantidad de 90.000 euros , con los intereses legales», detalla el fiscal.

El Ministerio Público tiene claro que este sujeto, dado que Rosa «no había reanudado la relación con él y no consentía que pudiera tener otra relación, decidió matarla y desde Málaga reservó billetes de autobús de Málaga a Granada y de Granada a Cartagena».

Al llegar, compró una escalera para subir a la casa de su víctima. Llevaba entonces encima un cuchillo jamonero. «Al llegar a la vivienda, Adrián S. C. escaló por la parte posterior con la escalera y accedió al balcón del primer piso, rompió un cristal de la puerta corredera y entró en el domicilio, donde cogió también un cuchillo más pequeño de mango naranja y otro de mango bicolor, blanco y fucsia y esperó fumando hasta que pasadas las 11.00 horas llegó Rosa, acompañada de sus abuelos, tras haber interpuesto denuncia contra él por haberle visto en Cartagena el día anterior», continúa el escrito.

La mató con los tres cuchillos, subraya la acusación pública. La chica empezó a pedir que la llevaran a un hospital, porque se desangraba. «Mientras los abuelos de Rosa pedían auxilio, el acusado, aprovechando queella no podía defenderse por las lesiones que ya le había causado, comenzó a clavarle los cuchillos mencionados de forma reiterada, persistente y sistemática, a pesar de los gritos de dolor que se oían desde fuera», apunta el fiscal. La mató.

«Adrián asestó todas las puñaladas estando viva Rosa, prolongando las mismas a pesar de los gritos y peticiones de esta, siendo mortal una herida inciso punzante en tórax, que interesó el pulmón y la aurícula derechas, así como varias heridas inciso punzantes en región cervical, causándole la muerte por shock hipovolémico asociado a mecanismo asfíctico por broncoaspiración de sangre», incide la Fiscalía.

Aunque el crimen se cometió en Cartagena, al ser violencia de género se le juzga en Murcia. Es la sección 3 de la Audiencia Provincial la que tiene las competencias en estos asuntos.